Unas placas ‘clonadas’ en el tiroteo de Los Otates

8 de Febrero, 13:00 horas, después del tiroteo en Real Acueducto del que los tapatíos tuvieron imágenes a detalle en redes sociales, una camioneta blanca con un sicario herido de bala en la caja circuló por cerca de 9 kilómetros sin ser frenada por ninguna autoridad, ¿cómo fue que ocurrió?

El 16 de febrero en rueda de prensa, el Fiscal del Estado Gerardo Octavio Solís ofreció detalles que ayudan a entender este escape: los criminales se hacen pasar por autoridad, llevaban placas falsas, una copia de las de una camioneta de la Fiscalía, reveló la revisión de imágenes del C5.

Ese día informó que en un cateo de la FGR en el que colaboró la Fiscalía estatal, encontraron uno de los autos implicados en el tiroteo, armamento, así como placas o “charolas” de identificación falsas de la Fiscalía, y placas vehiculares falsas que apuntan a que los criminales se “disfrazan” de autoridad.

‘Esto es más o menos común’

Pero no era la primera vez que el encargado de la institución que investiga delitos en Jalisco reconocía que por la Ciudad circulan criminales que suplantan a policías.

“Esto es más o menos común, desde luego utilizando también un lenguaje para en lo verbal intimidar a las personas, haciéndoles referencia que son miembros de alguna corporación policiaca”, dijo el Fiscal el 10 de agosto de 2020.

Del tema habló junto al Secretario de Seguridad Juan Bosco Pacheco luego de que un comando que se identificó como agentes estatales en Tonalá se llevara “detenido” a un hombre que fue reportado después como desaparecido.

¿Quiénes son los buenos?

La Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) ha documentados en sus recomendaciones la participación de comandos que dijeron formar parte de una corporación policial y que lucían prendas alusivas a ello.

La recomendación 35/2020 detalla que a decir de familiares en 5 de 27 casos de desaparición, a las víctimas se las llevaron o integrantes de la Fiscalía, o un grupo armado que dijo formar parte de alguna policía o personas con implementos que hicieron suponer que eran policías. La CEDHJ ha señalado que la ausencia de avances en la investigación complica saber si en efecto fueron integrantes de un grupo criminal o de una corporación policial.

No obstante, entre 2018 y 2020, la Fiscalía ha informado sobre detenciones, vinculaciones a proceso o sospechas de policías en 11 investigaciones, entre ellas casos como el de los 3 italianos, presuntamente entregados a criminales por policías de Tecalitlán.

¿Es tan fácil ser Policía Pirata?

“Torreta en Códigos. Para parabrisas. 8 funciones. 550$”, dice una publicación en Facebook que exhibe una foto del producto, documentó MURAL en agosto de 2020.
En línea también se venden uniformes, chalecos tácticos y antibalas, pistolas y placas similares a las que la Fiscalía aseguró tras el tiroteo del 8 de febrero.

El Código Penal Federal dedica el capítulo VII del Título Décimo Tercero al uso indebido de uniformes, divisas e insignias y penaliza con entre 5 y 12 años a quien los falsifique, y sanciona con 6 años a quien los almacene, distribuya, adquiera o utilice.
Los mismos 6 años de cárcel puede recibir quien utilice vehículos que tengan la apariencia de los usados por las fuerzas armadas o instituciones de seguridad pública.

Especialistas han señalado a MURAL que el problema es que la autoridad no ofrece resultados ni para perseguir la suplantación a la autoridad ni para sancionar los crímenes que cometen con ese “disfraz”. La oferta de torretas y otras de uniformes y chalecos siguen disponibles.

Información: Enrique Osorio.