COCO

1. Aceite, lechada y harina son productos que se pueden obtener de este fruto rico en fibra, potasio, fósforo, magnesio, hierro y vitaminas E, C y B. Para invitarlo al horno, hay que batir 1/4 a 1/3 de taza, en lugar de una taza completa de harina blanca. 

ALMENDRA

2. Son casi 20 gramos de proteína los que aportan cada 100 gramos del fruto del almendro, además de aportar calcio, vitaminas E y B, ácido fólico y grasas saludables. Para hacer pastelillos y otros horneados, la equivalencia es casi igual que el trigo, pues se recomienda 1 taza a 1 1/4 de harina de almendra

QUINOA

3. Minerales como calcio, hierro y magnesio, Omega 6 y vitaminas C, E, B1, B2, niacinina y fósforo, son algunas de la bondades de este pseudocereal libre de gluten, apto para intolerantes a la proteína del trigo. Para mezclarlo en cocina, vierte 3/4 a 1 taza de harina de quinoa, en vez de la taza del popular cereal. 

AVENA

4. El beta glucano (fibra) ayuda a disminuir los niveles de triglicéridos y colesterol “malo” en sangre y es justo el componente que se hace presente en la avena, materia prima que cada vez más cobra fuerza entre la repostería. Para mezclarla en casa en lugar de trigo, hay que batir 3/4 de taza a una completa, para también gozar su omega 3 y linoleicos (grasas buenas).

PLÁTANO

5. “El rey del potasio” también contiene fósforo, zinc, calcio y magnesio, y es rico en vitaminas B6, ácido fólico y vitamina C, además de que alimenta a las bacterias benéficas que se encuentran en el intestino, favoreciendo de paso al sistema inmunológico. Su uso en el horno se recomienda que sea de 2/3 de taza, en lugar de una completa de trigo. 

 

Información: Viridiana Muñoz. Fuente:  Ciclo a Granel