Filiberto “N”, por otra parte, fue condenado a 18 años de prisión por el mismo delito, mientras que Ernesto Alejandro “N” recibió 14 años de cárcel, por hechos registrados en 2019 y 2012, respectivamente.
El primero atacó a su propia hija en dos ocasiones en Tlaquepaque en tanto que el segundo a una menor que vivía con él en Zapopan. Ernesto tuvo bajo amenazas a la víctima hasta 2016, cuando la niña pudo denunciar.