En esos cinco municipios se localizan 18 puentes fronterizos, que de acuerdo con fuentes ministeriales, tienen injerencia del crimen organizado.
En los cruces existe una red de “halcones” que avisa sobre el movimiento de estadounidenses y/o migrantes, una mina de oro para las organizaciones criminales dedicadas al secuestro.
En Tamaulipas opera el Cártel del Golfo, dividido en tres facciones, de las cuales sobresale el denominado grupo Ciclones/Escorpiones, a quienes se les atribuye el ataque y secuestro de cuatro estadounidenses el pasado 3 de marzo, de los cuales fallecieron dos.