En sintonía con las restricciones derivadas por la pandemia del Covid-19, los miembros de Juventud y Familia Misionera no se rindieron y continuaron su labor por medio de llamadas telefónicas.
De esta manera, la familia Calzada Sánchez se comunicó con pobladores de la comunidad de Tepa el Chico, en Hidalgo, para llevarles un mensaje lleno de esperanza.
“Misionar en forma telefónica y compartir nuestras experiencias como equipo a través de videollamadas y Zoom nos hizo darnos cuenta que, aunque el mundo está en pausa, Dios nunca lo está para nosotros”, mencionó la consultora de marketing digital, Christelle Sánchez.
Como responsable misionera en este pueblo, Christelle señaló la importancia de hablar con las seis familias que les tocó, pues éstas tenían prácticamente dos años sin recibir la tradicional visita misionera
Asimismo, tras ver el entusiasmo con el que participaron sus tres hijas y su hijo, los Calzada Sánchez esperan que en próximas ocasiones se pueda retomar esta herramienta.
“Espero que el año que entra sea un poco más híbrido hacia lo presencial y menos a lo remoto, pero de cualquier forma no perder lo que aprendimos a distancia: esto ha sido buenísimo y ayuda a que muchas más familias se sumen”, externó el contador Ricardo Calzada.