Comparten red de empresas fantasma

Durante las administraciones del priista Rodrigo Medina y el independiente Jaime Rodríguez Calderón se tejió una red de empresas fantasma y prestanombres que se ha beneficiado con contratos millonarios por años. 

Estos fueron los hallazgos de una investigación realizada por EL NORTE durante cuatro meses, en la que se analizaron mil 918 facturas entregadas por el SAT vía transparencia, de empresas que aparecen en la lista de contribuyentes incumplidos y que fueron contratadas por el Gobierno del Estado entre 2014 y 2019.

El SAT entregó las facturas que comprueban el pago de 187.6 millones de pesos a 121 firmas calificadas por la autoridad fiscal como Empresas Facturadoras de Operaciones Simuladas (EFOS).

De estas 121 empresas, 62 fueron contratadas en la administración pasada, 36 en la actual y 23 facturaron con ambos gobiernos.

El Gobierno del “Bronco” pagó a estas firmas 39 millones 212 mil 55 pesos y su antecesor 148 millones 439 mil 941.8.

El modus operandi consistía en crear empresas a través de los prestanombres para facturar al gobierno y después liquidarlas. En otros casos solamente se daban de alta las empresas y se vendían las acciones a nuevos apoderados legales.

Para este trabajo se visitaron los 30 domicilios de las empresas que más recursos recibieron y de 10 personas que aparecen como socios, comisarios o apoderados en más de una empresa.

En el trabajo de campo se corroboró que ninguna empresa está localizada en el domicilio fiscal emitido en sus facturas, y de acuerdo con el testimonio de vecinos, nunca estuvieron.

En su lugar se encontró un estacionamiento, un taller de carpintería, locales de renta desocupados, domicilios habitados por familias, así como negocios con giros y nombres distintos.

Además, repiten patrones que evidencian la simulación: son creadas el mismo día o mes, comparten socios, están ubicados en el mismo domicilio que otra empresa, cambiaron de administradores muchas veces o fueron liquidadas después de haber facturado.

En el caso de los socios la mayoría no estuvo localizable pues se habían mudado, eran baldíos, casas abandonadas o de renta, generalmente ubicados en colonias populares.