“A partir de ahí mejoré con un estilo de vida saludable, mismo que combiné con lo personal y empresarial; además de la instrospección, como la meditación, que era algo nuevo para mí y que no hacía, pero ahora sé que conectar el alma, cuerpo, intelecto y existencia es lo que te hace llegar al otro lado”.
Asimismo, contó que desde sus inicios dentro del emprendedurismo, fue su pareja quien fungió como soporte, pues, incluso, se asoció con él en la industria de software, con la empresa DISC, misma que a la fecha es uno de sus grandes logros en el sector de los negocios.
Es así que la empresaria tiene la certeza de que no está sola en su camino, pues la siguen y apoyan sus seres queridos, ya sea con sus enseñanzas o compañía.
“Mi familia siempre me ha respaldado para crecer, desde chiquita yo me quise ir a estudiar fuera y ahí estuvieron, además, Dios me bendijo con este esposo que tengo, porque siempre se ha portado como un compañero, que, en vez de verme como competencia, me lleva de la mano para enseñarme sus grandes secretos”, compartió. Hace algunos meses, con su madurez y un recorrido y bagaje adquirido con el tiempo, dio el siguiente paso al convertirse en mamá de Máxima, su primogénita, de 6 meses de edad.
“Traer un bebé al mundo y mantener tus mismos roles con una responsabilidad inmensa es una labor titánica; antes era empática, pero ahora que lo vivo, considero que hay que darles a las mamás un reconocimiento diario”, expresó la también directora de programas sociales de la organización Peace for Life.
“No existen palabras para decir lo bonito que es tener otra vida bajo tu cuidado”. Finalmente, con la camiseta puesta por la comunidad, también colabora en proyectos de carácter social, como la organización Peace for Life, en la que es directora de programas sociales, y pretende dar visibilidad al trabajo de las mujeres, con el ideal de que cualquiera puede, al igual que ella, ser lo que quieran a nivel profesional y personal.