
Según el colectivo Ciudad Cervecera, a través del diseño y la elaboración de recetas, 29 proyectos dan identidad a la expresión cervecera chilanga.
A ellos se suman infinidad de sitios que promueven la cultura del fermentado de malta e impulsan, desde sus barriles y líneas, proyectos nacionales y extranjeros.
Sigue esta ruta para descubrir lugares poco convencionales que ofrecen toda clase de estilos, seleccionados y servidos por profesionales.
Drunkendog

Siempre hay nuevas propuestas y la frescura es una constante en sus taps. Los 36 barriles conectados trazan una ruta por la geografía cervecera mexicana y una que otra etiqueta internacional se cuela también en la lista.
Si el propósito es recorrer el mundo a través de la cerveza, éste es igualmente el sitio indicado con más de 200 opciones en lata o botella de importación exclusiva.
Procer Wine & Beer

En el corazón de la Ciudad de México, este espacio es un templo dedicado a las noches infinitas y la cerveza artesanal mexicana.
Uno de los rincones más bellos de esta urbe, donde, en un ambiente relajado, con DJ sets, jazz en vivo o gimnasio de dibujo, puedes probar alguna de las ocho líneas o la cerveza de casa acompañada con una tabla de quesos y carnes frías.
Amantoli Tap Room

Recién estrenado en la Roma, este proyecto impulsa cervecerías artesanales nacionales, incluso micro y nano, por lo que pueden encontrarse etiquetas no disponibles en otros lugares.
Hay hasta 15 opciones de barril a elegir. Y, aunque la oferta chelera es protagónica, también sirven agua lupulada y otros fermentos, como hidromieles, tepaches y kombucha.
The Anti Tap Room

Inspirados en los anti cafés estadounidenses, convirtieron un taller de empaques en cervecería y luego en coworking con fábrica de cerveza artesanal. Puede pagarse por hora o por día.
Ofrecen membresías -especialmente para emprendedores- que incluyen cerveza artesanal Los Manos. Además de tomarte alguna chela artesanal mexicana, puedes ir a ver programas deportivos, jugar videojuegos o ping pong.
Cyprez Tap Room

Su vocación es la de un tap room clásico: ofrecer casi exclusivamente las cervezas elaboradas bajo su marca. Los fieles a esta multi galardonada cervecería siempre van a encontrar por lo menos 10 barriles conectados con sus estilos de línea, colaboraciones y pequeños lotes de edición limitada.
Puede elegirse entre tres tamaños -ya dependerá de cuántos estilos quieran probarse- y el equipo de servicio está integrado por verdaderos geeks entusiasmados por asesorar a los neófitos en la materia.