Son muy lindos los íconos de frutas, verduras y otras viñetas plasmadas en los cajones y demás áreas de los refrigeradores, pero gracias a ellas se ha dado mala idea de cómo organizar los alimentos a bajas temperaturas, señala el chef Daniel Domínguez.

“Lo cierto es que deben guardarse a la inversa, las frutas y verduras van en la parte superior del refrigerador porque son justo los insumos que no gotean. 

“En cambio, las proteínas que sugieren almacenar en la parte superior, son las que deben almacenarse hasta abajo porque se suelen desjugar”, argumenta el ex profesor del Colegio Gastronómico, especializado en el área de costos, compras y almacén de alimentos.

Un nivel más abajo de las frutas y verduras, recomienda colocar los alimentos de hoja verde, como lechuga, espinaca, arúgula, cilantro y más, para evitar marchitarlos al presionarlos con el peso de otros artículos.

“Es muy importante desinfectarlos antes de guardar, y más aún, secarlos extendidos sobre un papel o un paño para alimentos, así se absorbe la humedad y evitamos que se pudran más adelante. 

“Después de secar, es buena idea envolverlos en un pliego nuevo de papel de cocina, y colocar dentro de una bolsa amarrada”, puntualiza el originario de Culiacán.

Por otro lado, los líquidos como la leche, jugos y aguas embotelladas pueden colocarse en las puertas, mientras que la crema y los quesos recomienda ponerlos un nivel arriba de las proteínas.

“Los quesos frescos, como el de mesa, asadero y panela, van al frente porque se deben sentar sobre papel de cocina que es necesario cambiar todos los días, debido a que sueltan suero. 

“Los quesos maduros, entre ellos el provolone, manchego y gouda, van detrás ya que no es necesario tenerlos tan a la mano, pues no sueltan suero”, detalla el chef ejecutivo de Bárbaro, restaurante de comida internacional, ubicado en Ocotlán.

Finalmente, de siete a 12 grados centígrados es la temperatura idónea para resguardar los alimentos en dicho electrodoméstico, pero una vez afuera, un buen manejo incluye temperarlos un poco antes de llevarlos al fuego.

Información: Viridiana Muñoz.