Fernanda Camarena Arreola tiene 29 años de edad y se describe como una mujer intensa, divertida, apasionada, leal y preocupada por su imagen, pues siempre le gusta verse bien.
Esta última característica la desarrolló desde que era una niña, pues en ese entonces solía ver cómo se arreglaba su abuela, Celia Bracamontes, lo que la encaminó a sentirse atraída por el glamour y el maquillaje.
“Cuando crecí y terminé mi licenciatura (2018) en el ITESO, tomé la decisión de aprovechar mi verano tomando un curso de automaquillaje, y de ahí nació mi carrera como maquillista”, comparte Fernanda, “comencé maquillándome yo para los eventos, y un día una conocida me agendó una cita y se empezó a correr la voz.
“Apasionándome por el tema, continué a tomar cursos con los mejores, como son Luis Torres, César Mushi, Pepe Gutiérrez, Olga Tomina, Obiel Moura y más”.
Su carrera progresó al grado de que, antes de la pandemia, ya tenía su estudio en una casa de belleza, pero tuvo que cerrar debido a la contingencia por Covid-19.
“Este año decidí entrar oficialmente a la escuela de maquillaje y certificarme por la SEP, pues mi visión se expandió a abrir mi propia escuela de maquillaje y continuar maquillando a mis clientas en mi nuevo y remodelado estudio de maquillaje”, afirma.
Para esta edición dedicada al Día de Muertos, Fernanda se estilizó como Catrina y, teniendo como escenario el campo de cempasúchil del Rancho San Juan Diego, personifica la esencia de la época y rinde homenaje a quienes ya partieron.
De viva voz
Fernanda, ¿qué es lo qué más disfrutas de ser maquillista?
Me encanta y me apasiona el mundo del maquillaje, no me puedo imaginar haciendo otra cosa que no sea esta, y lo que más disfruto es resaltar la belleza natural de cada una de mis clientas, haciéndolas sentir bellas y glamurosas.
¿Cómo describirías tu estilo para maquillar?
Glamuroso y elegante.
¿Cuál es tu meta en la vida?
Me encanta la idea de conocer el mundo, enamorarme y formar una hermosa familia, continuar con mi proyecto y seguir siendo feliz.
¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?
Ejercicio y mi vida social.
¡Síguela!
Instagram: @fercamarena_makeup
Homenaje a papá
El 1 de junio de 2021 es una fecha que quedó grabada tristemente en el corazón de Fernanda, pues ese día falleció su papá, Francisco Camarena Franco, a los 59 años de edad.
Francisco nació el 21 de octubre de 1961 y se casó con Ana Celia Arreola Bracamontes en 1990, con quien tuvo dos hijas, Fernanda y Ana, quienes actualmente tienen 29 y 26 años de edad, respectivamente.
“Para mí, (Ana) es el regalo más hermoso que me han dado mis papás, porque somos súper unidas y grandes amigas”, comparte.
Fernanda recuerda a su papá como un hombre disciplinado, deportista, alegre y espontáneo que, además de ser un padre estricto y determinado, siempre tuvo su carácter, mismo que les forjó a sus dos hijas, algo por lo que ellas siempre estarán agradecidas.
“Él fue el mejor papá y lo honraré siempre con amor, pues él estuvo al pendiente de mi mamá, de mi hermana y de mí hasta su último día”, afirma.
Entre sus pasatiempos estaban el golf, ir al gimnasio, ver deportes en la televisión, y viajar con su familia.
Desde el corazón
“El que mi papá falleciera fue completamente repentino y ha sido un proceso muy difícil, complicado, me cambió totalmente la vida, nuevas responsabilidades, pero creo que él nunca se fue, siempre está ahí guiándome y dándome señales para tomar buenas decisiones en el camino”, comparte Fernanda.
“En lo personal sufrí mucho, tuve mucho miedo, me sentí muy sola en ocasiones, busqué ayuda porque sentí que no iba a poder con esa tristeza tan grande, mi terapeuta Rocío Jazo es un amor, fui con ella al mes de que falleció mi papá, y hasta la fecha me sigue ayudando y me siento muy agradecida con ella.
“Me tomé fuerte de la mano de Dios, mi mamá y mi hermana fueron mi motivación y mis pilares, jamás nos soltamos y creo que nos unimos muchísimo, también mejores amigas y amigos estuvieron ahí para mí, viajar me abrió la mente y el corazón.
“Si me preguntas, creo que es el dolor más grande que yo he sentido, y el que él falleciera para mí fue horrible porque éramos amigos, cómplices, nos reíamos mucho juntos, amábamos comer sushi y lo acompañaba a ver sus deportes comiendo dulces en su cama.
“Mi papá era lo máximo para mí y era supercariñoso y tierno conmigo, aunque con las demás personas parecía ser duro. Su ausencia solo me motivó a querer ser mejor persona diario y a lograr todo lo que me propongo para que él se sienta siempre orgulloso de mí”.
De viva voz
Fernanda, ¿qué es lo que más extrañas o recuerdas de tu papá?
Su risa y sus abrazos tan especiales, eran apretados y me daba palmaditas en la espalda como cuando era niña.
¿Cuál es la mejor enseñanza que te dejó?
El orden en el trabajo, en mi vida personal y en lo espiritual.
¿Podrías compartirnos alguna anécdota que atesores de él?
Es una historia superbonita porque él me regaló a mis pomeranias (“Grecia” y “Kira”), que amo, y el día que fuimos a verlas con el criadero originalmente nada más me iba a llevar a una, pero como eran hermanitas, a la hora de que llegamos y las vio le dio ternura y en realidad me regaló a las dos, y son lo máximo de regalo que me pudo haber hecho.
¿Qué te gustaría decirle a tu papá en este Día de Muertos?
Papi hermoso, te extraño todos los días de mi vida, gracias por cuidarme y protegerme desde lo alto, sé que estás ahí y que jamás me dejarás, vives en mi corazón, todo lo que hago lo hago pensando en ti, en tus enseñanzas y en honrar tu vida con la mía.
Locación
La sesión de fotos tuvo como sede el Rancho San Juan Diego, un lugar donde podrás librarte del estrés y la rutina de la Ciudad mientras disfrutas del aire libre del campo mexicano.
Este establecimiento ofrece recorridos en los que aprenderás sobre la producción y el trabajo que realiza un floricultor para poder entregar flores y follaje de calidad.
Además, conocerás los invernaderos y podrás fotografiarte en sus campos de solidago, gypsophila y margaritas, sin olvidar a la estrella de esta temporada, el cempasúchil, cuyo amplio campo tiene como fondo el Cerro de la Cruz de Tlajomulco.
Después de los recorridos, este rancho pone a tu disposición una terraza donde podrás consumir alimentos y bebidas, así como participar en su taller de coronas o realizarte un maquillaje de Catrín o Catrina.
Para mayor información puedes contactarlos a través de su WhatsApp, 332-961-4125; en su página web, ranchosanjuandiego.com, o en su cuenta de Instagram, @rancho_san_juan_diego.
Si deseas visitarlo está ubicado en Potrero San Juan 4, San Sebastián el Grande, Jalisco.
Información: Jimena de la O. Fotos: Ángel Llamas. Locación: Rancho San Juan Diego, @rancho_san_juan_diego