Monchita Cosío, Ramona Cosío, Sergio Hernández Cosío, Antonio Cosío y Antonio Cosío

La música y los tambores marcaron el inicio de una tarde llena de valentía, destreza y tradición taurina en el Festival After 2.0

La emoción se sintió entre público y el escenario estaba listo para que Sergio Hernández Cosío, Iker Cué, Giovanni Aloi, José Ricalde y Emilio González protagonizaran una danza milenaria de fuerza y gracia. 

A lo largo de la tarde, los presentes en el Festival After 2.0 vivieron momentos de nerviosismo, pues algunos animales demostraron habilidad y coraje, pero los novilleros contestaron con temple y determinación que realzaron sus habilidades técnicas, físicas y mentales. 

Al terminar el Festival After 2.0, los participantes intercambiaron puntos de vista acerca de su desempeño en el ruedo. 

“Existe una gran afición por parte de mi familia que siempre me ha inculcado la fiesta brava desde una temprana edad. El día que debuté como ganadero en La Plaza México aún la recuerdo con mucho cariño”, dijo Sergio Hernández Cosío, novillero. 

Sergio es un hombre muy dedicado en lo que hace, su preparación física y mental es parte fundamental del éxito; estoy muy orgullosa de mi hijo y su gran desempeño en esta tarde”.

Sergio Hernández Cosío
Giovanni Aloi, Antonio Pérez, Pablo Amaya y Salvador López
Regina Cristiani, Ana Meza y María Aranda
Rafael Cue e Iker Cué
Maríana Sánchez, Mónica Fallon y Cecilia Rosal

Sin duda, la preparación previa debe ser algo primordial y Sergio compartió su ritual antes de salir a lidear. 

“Me gusta irme temprano a bañarme, cambiarme con mis amigos más cercanos e irme a la plaza con unos 15 minutos de antelación para llegar siempre a tiempo. La espada es la que quita y la que da, así es esto”, comentó Sergio. 

Por otro lado, José Ricalde dio un consejo para aquellos que están interesados en esta profesión.

“Hago esto por hobby, pero desde pequeño que me llevaron a la Monumental, me interesó. Algo que me gusta mucho es cuando sale el toro, son unos nervios muy bonitos”, contó José. 

“Deben apretar y, si de verdad lo quieren, lo van a conseguir, el momento más difícil siempre es el final cuando vas a tirar a matar, sabes que no se puede escapar”.

También del lado de los invitados, opinaron acerca de lo que les pareció el Festival After 2.0 de los cinco participantes, de los cuales cuatro estoquearon y uno ofreció el indulto. 

“Es una tradición milenaria en la cual el animal y el torero tienen la oportunidad de hacer arte. Si no existiera, se acabaría la raza del toro bravo  todo lo que representa en el campo”, platicó Ramona Cosío, fotógrafa y cofundadora del Abierto de Mujeres en el Arte. 

Valeria Martínez y Olivia Fernández
Susana Cortés, Isabel García y Raquel Harari
Ximena Legorreta, Cayetano Blanco y Constanza Díaz

+ Indulto en el ruedo

+Giovanni Aloi fue el único participante de la tarde que ofreció un indulto. 

+Este acto ocurre cuando el público y la autoridad taurina deciden perdonar la vida al toro, debido a su excepcional bravura, nobleza y comportamiento. 

+Este gesto es considerado un honor para el animal y una muestra de reconocimiento a su valentía y calidad como ejemplar de lidia. 

+Cuando un ser es indultado, retiran las banderillas y lo devuelven al campo para que viva el resto de sus días en libertad, donde es utilizado como semental en la ganadería.

Giovanni Aloi
Paola González, Andrés Vázquez, Alana de la Garza, Avelino González y Cecilia Zambrano
José Ricalde
Emilio González
Claudia Abraham, Pía Trotter y Lorenza Barona
Santiago Pérez, Andrea Funtanet y Paloma Márquez

El último recuerdo memorable que tengo es la despedida de Pablo Hermoso en La Plaza de Toros de México, fue algo que se sintió como una despedida de una persona muy emblemática en la Ciudad de México”.

Ana Sofía Calva y María Calva
Scarlett Espinosa, Natalia Zamudio, José Ignacio Gordon y Natalia Villarreal