A unos días de cumplir los 95 años, la Reina Isabel II se quedó viuda, su marido, el Príncipe Felipe, falleció a los 99 años, el 9 de abril.
Felipe, Duque de Edimburgo, se convirtió en el consorte más longevo en la historia de la monarquía británica. Se casaron en 1947 y, tras la ascensión de Isabel al trono, pasó casi 70 años al servicio del Reino Unido.
Tras el fallecimiento, ha sido la Monarca quien más ha resentido la pérdida.