Con el objetivo de contribuir activamente a la mitigación del cambio climático y acelerar la transición energética en México, Grupo México ha desarrollado un innovador modelo de generación solar que abastece de energía renovable a sus operaciones mineras hasta cargas menores de empresas externas.
A través de su División Infraestructura, su división de Energía opera actualmente dos parques eólicos ubicados en Oaxaca y Nuevo León, y una planta de ciclo combinado en Sonora. La energía generada en estas instalaciones se destina principalmente a sus propias operaciones mineras, metalúrgicas y ferroviarias.
Sin embargo, en su estrategia de expansión y sostenibilidad, la empresa ha incursionado de manera decidida en sistemas de energía solar fotovoltaica, no solo para su consumo, sino también para el de terceros que no pueden acceder al Mercado Eléctrico Mayorista.
El primer sistema solar del grupo fue instalado en 2011 en sus oficinas de Hermosillo, Sonora. Desde entonces, esta iniciativa ha evolucionado hasta convertirse en una sólida línea de negocio, con múltiples proyectos implementados en distintas unidades y para clientes externos.
Actualmente, Grupo México Energía ofrece contratos de Compra de Energía (PPA, por sus iniciales en inglés) con plazos de 10 a 15 años y sin necesidad de inversión inicial por parte del cliente.
Empresas como OIBSA, PMSA, Planigrupo, México Constructora y Cinemex, así como Buenavista del Cobre, ya se benefician de este modelo. Hoy en día, la operación incluye más de 50 cargas, superando los 7 MW instalados, con una cobertura promedio del 76 por ciento del consumo energético de los usuarios y un ahorro estimado del 32 por ciento.
Este esquema no solo permite una reducción significativa de emisiones de CO2, también genera importantes beneficios económicos. La energía solar reduce los costos operativos y minimiza la exposición a la volatilidad de los precios de fuentes convencionales. Para maximizar estos beneficios, Grupo México realiza diagnósticos energéticos que permiten identificar oportunidades de ahorro y eficiencia para cada cliente.
Una de las principales ventajas de este modelo es su flexibilidad. A través de los PPA, los usuarios adquieren energía limpia sin desembolsos iniciales ni preocupaciones por la operación técnica. Grupo México se encarga de todo: desde la inversión y la instalación, hasta la operación y mantenimiento del sistema. Esto representa una solución integral, confiable y rentable para las empresas.
La energía solar se consolida como una herramienta esencial para reducir el impacto ambiental de las actividades productivas y mejorar su competitividad. Con esta nueva línea de negocio, Grupo México reafirma su compromiso con la sostenibilidad, brindando soluciones energéticas que benefician tanto a sus operaciones como a otras empresas, en coherencia con su visión de responsabilidad compartida y liderazgo en la transición energética.