Guillermo Zapata nació bajo el signo del Dragón de Madera, la última vez que lo vivió fue cuando era recién nacido y la próxima vez que le tocaría, sería cuando tenga 120, por lo que tomó la decisión de viajar China para vivir el Año Nuevo Chino al máximo.
“Para los chinos, es un año mucho muy especial, tanto así que muchos hacen todo lo posible para que sus bebés nazcan en los años del Dragón, que son cada 12, por lo que bien podemos decir que a partir de agosto de 2023 y hasta mayo de 2024, andarán muy jariosos”, comentó, entre risas, el empresario.
“Los nacidos bajo este signo se dice que tendrán mucha fortuna, poder y dones de liderazgo y éxito en la vida.
Es el año del emperador o del gran duque; el único símbolo de los 12 animales que representan el horóscopo chino, que no es real, es decir, es una quimera o animal mitológico y, por ende, mágico y el más venerado en esa cultura”.
Además de festejar esta fecha, Guillermo Zapata decidió emprender esta aventura para ser parte del fin e inicio de una nueva etapa, la cual, en sus palabras, será, sin lugar a duda, fascinante y llena de retos para él y la humanidad.
“Al mismo tiempo, regresaremos a un mayor contacto con los orígenes tanto ecológicos, energéticos y espirituales y, por otra parte, a la era de la Inteligencia artificial, los cyborgs y cuestiones como el Chat GPT, que será demasiado fascinante y contrastante”.
¿Te gusta la idea de convertir éste en el mejor año de tu vida? Pues dale, te invito a hacer lo mismo, el método es gratis, hazlo y verás que lo conseguirás”.
VIVE EL AÑO NUEVO CHINO
El reconocido anfitrión de grandes fiestas no suele planear sus viajes con anticipación y éste no fue la excepción, pues lo hizo con tan sólo 15 días.
“Me gusta simplemente escoger un destino que me llame la atención y, una vez allá, conforme el clima, los atractivos del lugar y las amistades que vaya haciendo en el camino, irme moviendo. Literal, me gusta ir hacia donde el viento soplé una vez estando allá”, platicó.
Guillermo Zapata realizó la travesía en 17 días y arrancó en Hong Kong, para después, seguir por Filipinas, Manila y Boracay, isla del pacífico asiático en el archipiélago filipino.
“Viví el Año Nuevo Chino con mucho entusiasmo, admiración y respeto, pero, sobre todo, con la convicción y determinación de que este será hasta ahora el año de mi vida.Digo, alguno lo tendrá que ser, ¿no?, porque no éste”, dijo Willy, como lo llaman de cariño.
“Yo decidí que éste lo fuera, básicamente porque se me pegó la gana que así lo sea. No obstante, sé que nada llega fácil, gratis o por arte de magia, por lo que estoy determinado a trabajar duro por ello, pero confío en mi buena suerte, estrella y en mi majestuoso Dragón, que harán que todo lo quiera se hará realidad”.
A decir de esto, Guillermo Zapata está consciente de que si pone todo de su parte, el universo conspirará para que así sea.
“No es mera cuestión de fe o buenos deseos, voy a trabajar duro por ello, por lo que ya me organicé y mi plan es el siguiente: dividí mi vida en las áreas más importantes para mí y que conforman mi éxito y felicidad, que son salud, familia, trabajo, crecimiento personal y obligaciones”, compartió.
“Y me pregunté: ¿qué tendría que pasar para que en febrero del 2025 pueda yo decir que en cada una de estas áreas tuve un año maravilloso? Pues bien, enlisté lo que tendría que me gustaría que suceda, lo que tengo que hacer para que todas esas metas y logros se cumplan y pues a darle”.
Para no fallar en su plan, Guillermo Zapata se lo platicó a un par de amigas y a sus dos hijas, quienes le compraron la idea de hacer lo mismo e hicieron su lista.
“Nos reuniremos una vez al mes para ir palomeando cómo va nuestro avance, así iré firme y tenazmente logrando que lo propuesto lo vaya paulatinamente cumpliendo; al diablo la procrastinación y que viva el ir paso a paso logrando todas mis metas”.
+ Su top 5
Hong Kong fue uno de los sitios favoritos de Guillermo Zapata, que aunque no es una ciudad tan extensa, sí es muy alta y está llena de rascacielos, 657 para ser exactos y con seis edificios que superan los 30 metros de altura. Estas fueron las cinco cosas que lo maravillaron.
1.- Su landscape, ya que es impresionante ver todos esos edificios pegados a la Bahía de Victoria y como fue en la celebración de fin de año, el show de fuegos artificiales y drones se veía espectacular.
2.- El Gran Buda, en las afueras, que es una majestuosa escultura de bronce de más de 34 metros de altura que vale muchísimo la pena visitar.
3.- Para los amantes del arte, está el museo M+.
4.- En Kowloon hay que ir a comer al Hotel Península, sin duda, un clásico, y también al Ozone Bar, del Ritz Carlton, otro hotel que es uno de los más altos del mundo.
5.- Visitar Night Market, un mercado en un barrio muy pintoresco, en la noche se vende de todo.
Es bueno creer en algo y yo hoy decidí hacerlo en el Dragón y en que este año será, hasta ahora, el mejor de mi vida, y lo lograré”.
