MUY QUERIDO

Cursó la primaria en la escuela José María Velasco; años más tarde, entró a la Secundaria 63 Ángel María Basurto y, después, al bachillerato en la Vocacional 5 “La Ciudadela”.

Desde pequeño, sus padres le inculcaron lo importante que era el estudio para tener más oportunidades en la vida. Por ello, egresó de Relaciones Internacionales, de la ESCA del Instituto Politécnico Nacional, y realizó un diplomado en Alta Dirección en el IPADE.

En el ámbito profesional, ingresó a la Casa de Bolsa Acciones y Valores, en 1978, año en el que comenzó a escribir su gran historia laboral.

Durante los 80, escaló posiciones hasta llegar a ser director administrativo de Acciones y Valores Banamex, S.A. de C.V., y director de Finanzas de Afore Banamex, puestos en los que consolidó una gran amistad con los empresarios Alfredo Harp Helú y Roberto Hernández.

En 1988, junto a los empresarios Alfredo Harp Helú y Roberto Hernández

“En las instituciones siempre hay gente que por su dedicación, vocación empatía y cariño contribuye a que las empresas sean lugares mas cálidos para trabajar; Juan siempre fue un punto de encuentro, que por su carácter y empatía lograba que las distintas áreas encontrara la forma de colaborar.
Su pasión siempre fue encontrar la eficiencia y poner a trabajar a sus equipos para hacernos la vida mas fácil. Desde joven, manifestó una entrega incondicional al trabajo, dedicándole muchas horas a la empresa para que siempre llegáramos a buen puerto. Pronto se dio a conocer y por eso, a una edad temprana, se volvió socio de la Casa de Bolsa, siendo una de las personas más comprometidas con la institución. Formador de generaciones de empleados que contribuyeron a desarrollar la infraestructura que necesitábamos, sin duda, lo extrañaremos por su calidez y empatía”.

ROBERTO HERNÁNDEZ

En 2014, durante un viaje a Cancún, con su esposa, María Teresa Solís

En su primer trabajo, conoció a María Teresa Solís, con quien formó una familia al lado de sus hijos, Juan Antonio y Jorge Alberto.

Quienes lo conocieron coinciden que como esposo, padre y suegro fue excepcional, pues siempre brindó su amor y sabiduría.

En 2019, celebró su cumpleaños con su esposa, María Teresa, y sus nietos, Mariana, Julia,
José Ángel y Juan Pablo.

Sus nietos, Juan Pablo, José Ángel, Mariana, Julia, Jorge (q.e.p.d.), y el más pequeño -que aún no nace-, fueron su tesoro, pues se convirtieron en su gran motivación.

“Juanelo”, como le llamaban de cariño, perdió la batalla contra una enfermedad neurodegenerativa, pero las enseñanzas, como el dar amor al prójimo, ser sencillo y sincero, quedarán en los corazones de los suyos. Descanse en paz.

Compartió su pasión por el futbol y las Chivas Rayadas del Guadalajara.

“Lo recordaremos siempre, no hay manera de olvidarlo…Juan Luz está presente en cada rincón y en todos nuestros corazones.
Nos deja un gran legado, el sentido de trabajo, responsabilidad, sacrificio y alegría que tarde o temprano dará frutos.
Todavía en sus últimos días, padeciendo una enfermedad terminal, siguió trabajando con la misma intensidad hasta que su cuerpo ya no se lo permitió”.

SU ESPOSA, MARÍA TERESA SOLÍS, Y SUS HIJOS, JUAN ANTONIO Y JORGE ALBERTO 

En 2019, durante el cumpleaños de su esposa. (De pie) Juan Antonio, Juan Luz y Jorge Alberto Garrido. (Sentados) Juan Pablo y José Ángel Garrido, Cinthya Gálvez, María Teresa Solís, Mariana Garrido, Arcelia Valadez, Julia Garrido y Carmen Axotla.

Acompañado de José Marrón, Alfredo Harp Helú, Roberto Hernández, Esteban Malpica, Eduardo Navarro y Alfredo Loera.