El domingo 7 de julio, con una Asamblea Nacional a su favor, aunque con delegados priistas inconformes al interior y al exterior del recinto donde se reunieron, el líder tricolor logró la aprobación de la reforma a los estatutos que le permitirán reelegirse hasta por ocho años más.
En el documento avalado por mayoría se argumenta que alargar la permanencia en los cargos no es arbitrario, sino que es una práctica “mundial”, que ha permitido a los “líderes consolidar su posición y ejecutar proyectos de largo plazo”.
Con esta reforma, también se le darían más facultades a “Alito”, entre ellas elegir a los coordinadores parlamentarios e incluso controlar las deudas del partido.