MODERNA

La biotecnológica estadounidense Moderna anunció que su vacuna contra la Covid-19 produjo actividad neutralizadora contra variantes del coronavirus, entre ellas la delta, en un estudio de laboratorio todavía no revisado por pares.

Según un comunicado, la vacuna produjo títulos de anticuerpos contra todas las variantes sometidas a una prueba “in vitro”, entre ellas la beta, identificada en Sudáfrica; la delta, en India, y otras ubicadas en Nigeria, Uganda y Angola.

SPUTNIK V

La vacuna rusa Sputnik V contra el Covid-19 tiene una efectividad de alrededor del 90 por ciento contra la variante delta altamente contagiosa del coronavirus.

Sus desarrolladores encontraron anteriormente que la vacuna era casi un 92 por ciento efectiva contra la cepa original del coronavirus.

Denis Logunov, subdirector del Instituto Gamaleya de Moscú que desarrolló la Sputnik V, dijo que la cifra de eficacia de la variante delta se calculó con base a registros médicos y de vacunas, informó la agencia de noticias RIA.

 

PFIZER

La farmacéutica estadounidense está haciendo un estudio para evaluar la seguridad de una tercera dosis de refuerzo que sea eficaz contra las variantes del virus del SARS-CoV-2 que puedan ir surgiendo, dijo el presidente y director general de Pfizer España, Sergio Rodríguez.

En estos momentos, la compañía elabora un análisis sobre la variante delta -que se transmite dos veces más rápido que el coronavirus inicial– pero por ahora no está concluido.

 

De acuerdo con una investigación de la Universidad de Oxford, esta vacuna junto con la de AstraZeneca son ampliamente eficaces contra las variantes delta y kappa, identificadas por primera vez en India.

ASTRAZENECA

Una tercera dosis de la vacuna de AstraZeneca genera un refuerzo inmunológico “fuerte” frente al coronavirus y sus nuevas variantes, según un estudio preliminar publicado en la revista médica “The Lancet”.

Los resultados iniciales de esta investigación, publicados como “pre-print” (es decir, todavía no sujeta a revisión externa por parte de otros expertos), reflejan, asimismo, que retrasar más semanas la segunda dosis puede ser beneficioso en el caso de esta vacuna.

El estudio, desarrollado por la Universidad de Oxford, apunta que cuando el intervalo entre las dos primeras dosis es de 45 semanas -unos diez meses-, los niveles de anticuerpos son hasta cuatro veces más altos que con un período intermedio de 12 semanas.

Del mismo modo, la Universidad de Oxford anunció que empezó a inyectar a voluntarios una vacuna desarrollada con el laboratorio AstraZeneca contra la variante beta del coronavirus, detectada inicialmente en Sudáfrica.

La universidad británica y el laboratorio anglosueco esperan reunir a 2.500 voluntarios en Reino Unido, Sudáfrica, Brasil y Polonia para desplegar las fases 2 y 3 de este ensayo clínico en humanos.

OTRAS VACUNAS

Algunos laboratorios no han terminado estudios relacionados con la variante. Un excomisionado de la FDA dijo a medios estadounidenses que la vacuna de Johnson & Johnson parece tener una efectividad de 60 por ciento, aunque no se ha brindado información mayor al respecto.

Por su parte, no hay información completa sobre la efectividad de las vacunas de Sinopharm, Sinovac Cansino. Un ex comisionado de salud de China dijo a Reuters que parecen tener una menor respuesta ante el contagio, mientras un vocero de Sinovac dijo que parece ser tres veces menos efectiva para prevenir un contagio de la variante, aunque sigue protegiendo de síntomas graves y hospitalización.