HIJA DE HOLLYWOOD
Nacida hace 75 años en Los Ángeles California, el 12 de marzo de 1946, Liza May Minnelli es lo que se puede catalogar como una verdadera hija de Hollywood. Producto de la relación entre la famosísima actriz Judy Garland y el laureado Vincente Minnelli, Liza creció en medio del espectáculo, de hecho, debutó a los 3 años en el cine, en los brazos de su madre, en la cinta En Aquel Viejo Verano.
No obstante, se haría de su propio brillo y ha logrado forjar un estatus de estrella por ella misma, como actriz, bailarina y cantante. Tanto así que, sin el apoyo de sus padres, a los 17 años se mudó a Nueva York para estudiar artes.
Debutó con éxito en la obra Off Broadway, Best Foot Foward.
Con todo y sus altibajos: éxitos, fracasos, adicciones, enfermedades y desamores, es de las pocas celebridades que tienen en su haber el Óscar, Grammy, Emmy y Tony.
MARQUESINA DE BROADWAY
El teatro ha sido su casa y el lugar donde su nombre más ha brillado.
A los 19 años, Liza Minnelli se convirtió en la actriz más joven en ganar el premio Tony como Mejor Actriz por su trabajo en la obra Flora the Red Menace (1965).
Fue en esa puesta donde conoció y trabajó por primera vez con John Kander y Fred Ebb, quienes se convertirían en sus grandes colaboradores, produciendo y dirigiendo la mayoría de sus proyectos escénicos y televisivos.
Para 1974, le otorgarían un Tony especial. Cuatro años después, en 1978, ganó otro reconocimiento por su actuación en The Act, y en 2009 su espectáculo Liza’s at the Palace! recibió un premio.
'QUIZÁ ESTA VEZ'
Para muchos, Liza Minnelli será por siempre la eterna Sally Bowles de la cinta Cabaret, estrenada en 1972 y dirigida por el afamado Bob Fosse.
Y no es una cuestión gratuita, pues por la película ganó el Óscar como Mejor Actriz, aunque ya había recibido una nominación en 1969 por The Sterile Cuckoo.
Esa imagen de la estrella, con su pierna estirada y sentada en una silla, es un clásico cuadro de la cinematografía. Si a eso se le agrega la gran interpretación que hizo del tema “Maybe This Time”, no extraña por qué el filme y la actriz son dos cosas que no se pueden separar.
Aunque continuó su carrera en la pantalla grande, incluso de la mano de importantes directores como Martin Scorsese en New York, New York, su propio padre en A Matter of Time, y Steve Gordon en Arthur, con ninguno logró lo que hizo con Cabaret.
MÚSICA Y TV
Es cierto, no heredó la belleza de su madre, pero sí su privilegiada voz con la que desde muy joven deslumbró en los club nocturnos de Nueva York y otras ciudades de Estados Unidos.
Liza! Liza!, en 1964, fue su álbum debut. It Amazes Me y There is Time siguieron en su discografía, que cuenta con 11 discos de estudio, el más reciente Confessions, en 2010.
En 1990 recibió el Grammy Legend Award.
En la televisión, Liza también hizo lo suyo. Desde sus primeras apariciones junto a su madre en The Judy Garland Show, la serie dramática Mr. Broadway, pasando por el especial Liza With a “Z”: A concert for Television, que le valió el Emmy.
A lo largo de los años ha tenido varias actuaciones especiales en series como Arrested Development, Smash y Drop Dead Diva, entre otras.
CUATRO BODAS Y...
Cuatro bodas y cuatro divorcios son los que a la fecha lleva la actriz.
En 1967 unió su vida a la de Peter Allen (foto), quien era homosexual y de quien se divorció en 1974. A meses de su separación, se casó con el productor y director Jack Haley Jr.; el divorcio llegó en 1979.
Su matrimonio más largo fue con el artista Mark Gelo. Estuvo casada con él entre 1979 y 1992.
Y con el promotor David Gest se casó en 2002 y se separó al año siguiente. La actriz nunca tuvo hijos.
LOS DEMONIOS DE LIZA
En la década de los 70, Minnelli fue la estrella también de las discotecas en Nueva York.
La actriz padeció alcoholismo y adicción a las drogras prescritas, especialmente al Valium, después de la muerte de su madre. Aunque también consumió otro tipo de drogas junto a su inseparable amigo Andy Warlhol.
A lo largo de su vida ha dicho que se trata de una cuestión hereditaria, enfermedades que recibió de su madre.
ÍCONO GAY
“¿Qué por qué les gusto a los gays?… ¡Los gays tienen muy buen gusto!”, acostumbraba a decir Liza.
Más allá de haberse casado con uno y que estuviera rodeada de muchos de ellos durante toda su vida, tan sólo su abuelo materno, Frank Gumm, también lo era. Se dice que su padre, Vincente Minnelli, era bisexual y que su madre, Judy Garland, tuvo relaciones con varias mujeres; hoy por hoy es un ícono de la comunidad LGBT+.
Su relación directa con el tema “Somewhere Over the Rainbow”, que su madre interpretó en El Mago de Oz y que es en la actualidad un himno de la comunidad, la consagran como esa figura.
Sin contar que su interpretación, su amor por Broadway, el drama en su vida y, en general, su historia la han convertido en esa diva gay.
