Contra todo pronóstico, los Mercedes escalaron a la tercera y cuarta posición en Bahréin,
El W13 no era tan veloz como el Ferrari y el Red Bull, pero apostó a la suerte y a un milagro para subir al podio.
En la arrancada, Lewis Hamilton le ganó la cuarta posición a Sergio Pérez, pero el RB18 recuperó su lugar rápidamente.
Casi al final de la carrera, una ventana se abrió para el siete veces campeón. El abandono de Max Verstappen y la caída en el rendimiento de Checo, fueron suficientes para amarrar la tercera plaza.
George Russell cerró cuarto y sumó puntos importantes para las “Flechas Plateadas”.