Kurt Russell sacudió la cadera. Val Kilmer recreó la sincera y conmovedora voz. Y Michael Shannon… bueno, los créditos lo identificaban como Elvis Presley, así que ese era el personaje que debía haber estado interpretando en Elvis & Nixon, ¿verdad? 

 

Desde la muerte del “Rey del Rock”, en 1977, a los 42 años, más de una docena de actores, y un extraterrestre, han retratado su andar, su hablar y su famoso encanto en docenas de películas y programas de televisión. Ahora uno más se ha unido a sus filas: Austin Butler, cuyos giros de cadera acaparan la nueva Elvis, de Baz Luhrmann. 

Entonces, ¿cómo se compara el “Rey” sensual y con cara de bebé de Butler contra el cantante ganador del Globo de Oro de Jonathan Rhys Meyers o el rockero sobre la colina de Harvey Keitel? Ofrecemos nuestra clasificación de mejor a peor. 

Kurt Russell - Elvis (1979)

El perfectamente peinado copete, la voz cruda y emotiva, los frenéticos movimientos de cadera, el reluciente y ceñido traje de pedrería… parpadea, y fácilmente podrías creer, gracias a esta representación casi perfecta en una película para TV de 1979, que Kurt Russell es Elvis. Claro, Russell en realidad no canta eso lo hizo todo el cantante de country Ronnie McDowell, pero esa voz hablada es acertada. 

Jonathan Rhys Meyers - Elvis: The Miniseries (2005)

El serial de dos partes, que aborda el ascenso de Presley desde la escuela secundaria en Mississippi hasta el estrellato internacional, es un escaparate para las palpitantes piernas de Rhys Meyers (con los memorables apoyos en el reparto de Randy Quaid como el coronel Tom Parker, promotor del rockstar, y de Rose McGowan como la actriz Ann-Margret, con quien se rumoreaba que el ídolo había tenido una aventura). Al igual que Russell, Rhys Meyers no canta, pero sincroniza los labios perfectamente con una opción aún mejor: la música real. Fue la primera obra biográfica para la cual los herederos de Presley permitieron usar las grabaciones originales.

Tyler Hilton - Walk the Line (2005)

Hilton aparece en cuatro escenas de esta película biográfica de Johnny Cash como un joven Elvis, frente a un joven Joaquin Phoenix como Cash. Fue una de las primeras incursiones de Hilton en la actuación —él se consideraba más un músico en ese momento, pero logra el estilo vocal arrastrado de Presley y la convicción profundamente sentida de su canto.

Val Kilmer - True Romance (1993)

Este drama criminal romántico, escrito por Quentin Tarantino, no se centra en el “Rey”, sino en un fan de Elvis (Christian Slater) y su nueva esposa, quienes huyen de los mafiosos. 

Pero la aparición del Elvis de Kilmer, con todo y su brillante traje dorado, podría ser la parte más memorable (y ya es decir en una película que también contó con Patricia Arquette, Dennis Hopper, Gary Oldman, Samuel L. Jackson y un joven Brad Pitt)

La aparición de Kilmer alcanza un máximo de dos minutos y sólo se le acredita como “mentor”, pero la suave voz que le susurra pensamientos asesinos al oído a Slater tiene la inequívoca intención de ser la del “Rey”, y Kilmer lo domina. 

Harvey Keitel - Finding Graceland (1998)

De acuerdo: en términos estrictos, Harvey Keitel no es Elvis, sino “Elvis”, una versión ficticia más vieja y muy viva de un Presley que fingió su muerte en 1977 después de sentirse abrumado por las presiones de la fama. Keitel clava la sensación de chocolate derretido de la voz del rockero y ofrece un retrato interpretativo completo del “Rey”, con sacudidas de cadera y contoneos de hombros. 

La película fue producida por la ex esposa de Elvis, Priscilla Presley, y las escenas se filmaron dentro de la mansión Graceland, en Memphis

Bruce Campbell - Bubba Ho-Tep (2002)

En esta cinta mitad comedia y mitad terror con clasificación R, Bruce Campbell es un anciano imitador de Elvis en un asilo, Ossie Davis es un residente que dice ser el Presidente John F. Kennedy, luchan contra una momia egipcia que les chupa las almas a los residentes y, créannos, la trama funciona. Campbell aporta un carisma adorablemente crujiente al papel, y sus monólogos autocríticos sobre el envejecimiento, en la cama del hospital, son sorprendentemente conmovedores.

David Keith - Heartbreak Hotel (1988)

“Heartbreak Hotel” suena, por el título, como una película solo para las fans del rockero, pero en realidad es una comedia escrita y dirigida por Chris Columbus sobre un adolescente que secuestra a Elvis como regalo para su madre cuando se está recuperando de un accidente automovilístico (es el cantante favorito de la mujer). 

Los críticos, y el público, le dieron a la interpretación de Keith una acogida bastante tibia, y Rita Kempley, de The Washington Post, concluyó en su columna que “interpretar a Elvis es como interpretar a un Kennedy, casi imposible”. 

Al menos, a alguien le gustó: el “Rey” de Keith, que era paternal, decente y libre de drogas, obtuvo la bendición de los herederos de Presley y del club de fans nacional de Elvis.  

Don Johnson - Elvis and the Beauty Queen (1981)

Este filme televisivo se centró en el final de la vida de Elvis y su relación con la participante en un concurso de belleza Linda Thompson, con quien vivió una relación sentimental después de terminar su matrimonio, de seis años, con Priscilla Presley. 

A juzgar por los clips en YouTube, Johnson lució un traje ceñido como un Elvis atontado, sí, pero su aguda voz era más adecuada para un sketch de Saturday Night Live que para una escena de seducción, y su tupida peluca negra era francamente cursi (y eso fue antes del espeso delineador de ojos y el rímel). 

Michael Shannon - Elvis & Nixon (2016)

Si no escuchásemos a un guardia de seguridad decir “¡es Elvis Presley!”, no reconoceríamos que el Elvis angustiado y hosco de Michael Shannon sería supuestamente el “Rey”. 

Su escarpado rostro contrasta con los suaves rasgos del ídolo, y, combinado con una voluminosa peluca negra, su Elvis huele a Michael Crawford en el musical El Baile de los Vampiros

La película, una comedia histórica, se centró en una reunión de 1970 entre Presley y el Presidente Richard Nixon (interpretado por Kevin Spacey, quien tampoco se parece a su homólogo de la vida real). 

Shannon es un gran actor de carácter, pero no puede superar este terriblemente malo reparto pese a la reluciente hebilla dorada de su cinturón, gafas oscuras, camisa de cuello alto y llamativos anillos. 

Bonus track: Stitch - Lilo & Stitch (2002)

Él no es más que un sabueso extraterrestre. En esta comedia animada, el Experimento 626, también conocido como Stitch, usa una peluca negra, un mono blanco y un ukelele para complacer a Lilo mientras ésta trata de enseñarle a ser un ciudadano modelo. Y, sinceramente, según la cantidad de bañistas que se desmayaron cuando recibieron uno de sus coquetos guiños, tendríamos que coronarlo como el campeón del giro de cadera.