El pronóstico del clima indicaba que llovería todo el día, sin embargo, eso no fue un impedimento para que fanáticos del vino se pusieran sus mejores outfits, combinados con un buen par de botas -como orgullosos norteños- y brindaran con un buen tinto en la más reciente fiesta de la vendimia de Hacienda Encinillas.
Ésta fue la sexta edición del festejo a la vid, en Hacienda Encinillas, a la que se dieron cita cerca de mil invitados provenientes de diferentes latitudes, con un fin común, disfrutar de sus vinos favoritos y de la atención de sus anfitriones, la familia Vallina, quien abrió las puertas de este espacio después de una pausa a causa de la pandemia.
“Éste es el reinicio de la celebración, porque dejamos de hacerla por un tiempo, justo para evitar la concentración de gente y que pudiera haber algún contagio; siempre con responsabilidad social”, dijo el empresario Eloy Vallina, quien en todo momento estuvo acompañado por su esposa, Laura Pons.
“Precisamente, estos dos últimos años no se dio la difusión que esperábamos, pero trabajamos en nuevos proyectos: un vino blanco y un rosado con burbujas”.
Después de dos años de no poder hacer nada, me siento muy emocionada de regresar y recibir a la gente aquí para que disfrute de esta gran celebración”.
El aroma a tierra mojada contrastó a la perfección con el de los distintos vinos que se sirvieron a lo largo de la tarde en Hacienda Encinillas, los cuales maridaron un menú preparado para la vendimia: una ensalada de verano con un toque de granada y aderezo de cítricos; corazón de filete de res choice en salsa de blackberry con puré de coliflor, aceite de trufa, parmesano reggiano y papitas cambray al romero, y dos postres.
CELEBRACIÓN AL VINO
Con el sol a medio asomar y una ligera llovizna, en los alrededores continuaron las actividades, como la tradicional pisa de uvas, pláticas con enólogos expertos y recorridos por las cavas, mientras, la música del grupo la Caries invitaba a los presentes a quitarse el frío en la pista.
Me encanta venir a esta vendimia, por eso no dejamos que la lluvia nos desmotivara y aquí estamos, disfrutando de los vinos que más nos gustan”. NICOLE TOUCHÉ
“Me encanta el ambiente tan bonito de este festejo, por eso siempre vengo, porque me parece un orgullo que pongan el nombre de Chihuahua en alto y demuestren que aquí también se hace muy buen vino”, añadió la empresaria Patricia Creel, quien es una apasionada del merlot y el cabernet sauvignon.
Finalmente, al caer la noche, los asistentes se retiraron satisfechos por lo vivido a lo largo del día, no sin antes deleitarse con un vasito de esquites y, por qué no, su botella de vino favorita en mano.
Una de las actividades favoritas fue la pisa de uvas, tradición que se remonta al siglo 19 como método
para transformar el fruto en vino.
¡DELICIOSO!
Un menú de tres tiempos, creación de la chef Rocío González Villarreal, fue el que se sirvió
durante la vendimia de Hacienda Encinillas.
- Ensalada de verano con un toque de granada y aderezo de cítricos
- Corazón de filete de res choice en salsa de blackberry con puré de coliflor, aceite de trufa, parmesano reggiano y papitas cambray al romero
- Cheesecake de chocolate con coulis de zarzamora y arándanos
- Pavlova de piña y maracuyá
Los anfitriones se mostraron orgullosos de lanzar su primera crema de vino,
la cual se une a las 11 etiquetas ya existentes de esta casa vitivinícola.
Ésta fue la última vendimia que se celebró
antes de la pandemia
La familia Vallina también se reunió en su fiesta vendimia en 2019 y así lo compartió en su cuenta de Instagram.