Otras joyas estadounidenses

Cierto, fue gracias al Juicio de París –una cata a ciegas, realizada en 1976, donde los vinos californianos se impusieron a los franceses–, que Estados Unidos atrajo hacia sí los reflectores enófilos.

Por fama y volumen de producción, California es el máximo referente vinícola del país vecino, pero otras regiones se abren camino, a paso firme, entre los amantes del vino. Específicamente Oregón y Washington, dos estados costeros, situados al noroeste, son joyas por descubrir.

“Cada copa de vino proveniente de estas regiones contiene 200 millones de años de historia. Pues gracias al Cinturón de Fuego del Pacífico y a los movimientos de las placas tectónicas (Juan de Fuca y norteamericana) se formaron las montañas que circundan a estas dos regiones vinícolas”, puntualiza la sommelier Laura Santander.

Entre las singularidades que favorecen el desarrollo y la expresión de las vides, deben mencionarse tres tipos de suelo: marino, volcánico o basáltico, y loess (uno muy particular derivado del derretimiento de la última Era del Hielo y su gran arrastre de sedimentos).

Un vistazo al terroir

Pero, antes del descorche, algunos datos sobre estas regiones:

Oregón

Coincide en latitud con la prestigiada Borgoña, por lo que las uvas más plantadas son las mismas: Pinot Noir y Chardonnay, cepas favorecidas por un clima frío. Los viñedos se sitúan prácticamente a lo largo de los mil 900 kilómetros de costa.

Está conformado por 21 regiones. La más importante, por extensión, variedad de climas y suelos, es Willamette Valley, con 10 mil 300 hectáreas de viñedos. Allí se produce el 68 por ciento del vino de Oregón.

Su historia como región vinícola comienza a escribirse en 1947, cuando Peter Britt establece la primera vinícola con variedades autóctonas. Posteriormente, David Lett, Charles Coury y David Adelsheim promueven su crecimiento y apuestan por la Pinot Noir como uva emblemática.

Para darse una idea del explosivo crecimiento que esta región estadounidense ha tenido: en 2000 había 139 bodegas, para 2019 sumaban 908. La gran mayoría (75 por ciento) son boutique (producen máximo 5 mil cajas) y apuestan por vinos premium, orgánicos y biodinámicos.

En la región hay, en total, 82 variedades de uva plantadas. En sus Pinot Gris puede encontrarse la calidad de los vinos alsacianos y mucha mineralidad. Sus Syrah poseen expresiones elegantes, similares a las del Valle del Ródano (especias, hojas deshidratadas). Y la Riesling es la reina de los vinos dulces; su gran concentración de azúcar es compensada con buena acidez.

Los vientos provenientes del Pacífico son los responsables de sanear y refrescar los viñedos, regalar acidez en copa y evitar que las heladas afecten a las viñas.

Washington

Bodegueros y viticultores trabajan en tándem. Las vinícolas se comprometen a comprar las cosechas. Pese a encontrarse más al norte, los viñedos se sitúan en un clima semidesértico, lo que favorece a variedades como Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah. Aunque, se dice que la Sangiovese cumple con todos los requisitos para ser la cepa emblemática.

En Washington se localizan 16 AVAs (American Viticultural Area). La más importante, por extensión y volumen de producción, es Columbia Valley, de donde proviene una cuarta parte del vino de todo el estado.

Las primeras uvas se plantaron desde 1825, en Hudson Bay. Sin embargo, tras la prohibición, el vino de mala calidad favorecía el contrabando hasta que Walter Clore, considerado el padre del vino en Washington, apuesta por cepas europeas.

Hoy son más de mil bodegas –90 por ciento de ellas boutique– y 400 viticultores los que conforman la región; suman 24 mil las hectáreas plantadas y 45 por ciento de sus vinos han sido calificados con más de 90 puntos por la revista especializada Wine Spectator.

En los terruños de Washington pueden hallarse 70 variedades de uva. La Riesling, una de las primeras cultivas, regala expresiones florales y de frutos de hueso. La Chardonnay suele ser distintivamente crujiente y delicada. La Cabernet Sauvignon encuentra allí condiciones ideales para una maduración lenta y la Merlot resulta con notas a cereza y bayas dulces.

La industria vitivinícola de esta región está seriamente comprometida con las prácticas agrícolas sostenibles y la conservación de los recursos hídricos. Son numerosas las bodegas con certificación orgánica y biodinámica.

Fuentes: Master class “Vinos de Oregón y Washington”, impartida por la sommelier Laura Santander; Oregon Wine Board y Comisión del Vino del Estado de Washington.

Sorbo a sorbo

Siete etiquetas para descubrir las expresiones de Oregón:

CenterStone Pinot Noir

Bodega: Citation Wine

Región: Willamette Valley, Oregón

De color rojo rubí muy pálido y brillante. Pronunciados aromas de frambuesa, mora, fresa y cereza. Ligero, con acidez vibrante, taninos finos, crujientes y elegantes.

$759 en wineconnection.mx

Sokol Blosser Pinot Gris

Bodega: Sokol Blosser Winery

Región: Willamette Valley, Oregón

Aromas de flores blancas, peras maduras y miel se combinan en su buqué. En boca posee una acidez fresca y algunos recuerdos de manzanas verdes y melón dulce.

$720 en monkeyblue.mx

Chardonnay Arthur

 

Bodega: Domaine Drouhin

Región: Dundee Hills, Oregón

Cremoso, con notas de fruta blanca madura, flores blancas y toques de miel y especias. En boca es untuoso, vibrante, muy equilibrado con acidez fresca y final largo y cítrico.

$1,472 en thewineco.mx

Adelsheim Pinot Noir Rosé

Bodega: Adelsheim Vineyard

Región: Willamette Valley, Oregón

De color asalmonado claro, con aromas de fresas frescas, melocotón, un toque floral y fondo cítrico. En el paladar es suave, jugoso, de amplia estructura y brillante acidez.

$950 thewineco.mx

Alexana Riesling Revana Vineyard

Bodega: Alexana Winery

Región: Dundee Hills, Oregón

Su aromática nariz conjuga manzana, melocotón y limón. En boca es un vino sólido con acidez equilibrada, cierta expresión mineral y un final prolongado.

$940 en laurasantander.mx

Cristom Pinot Noir Louise Vineyard

Bodega: Cristom Vineyards

Región: Eola-Amity Hills, Oregón

Regala los característicos aromas de mora, con toques de pimienta y chocolate. En el paladar, las notas florales se acompañan de un tanino suave y aterciopelado.

$2,781 en mercadodevinos.mx

Archery Summit Pinot Noir

Bodega: Archery Summit

Región: Dundee Hills, Oregón

Nariz compleja con notas de roble, ruibarbo, clavo, canela y un toque floral. En el paladar es goloso, con taninos finos, recuerdos de frutas negras y marcada mineralidad.

$2,690 en bottleshop.mx

Textos: Teresa Rodríguez
Fotos: Cortesía Washington State Wine, Travel Oregon y Carolyn Wells Kramer
Edición: Fabiola Meneses 
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