UNBOXING

Antes de ir a sus novedades, quiero contarte que en la caja se incluye la consola, con los Joy-Con blancos, sus respectivas correas, un armazón para acoplarlos y jugar como si fuera un control unificado, además del cable HDMI de alta velocidad, el adaptador de corriente y la base de color blanca.

A detalle:

Nintendo Switch OLED

  • Pantalla: OLED de 7 pulgadas, con resolución 720p (1280 x 720) y capacidad multi táctil.
  • CPU/GPU: NVIDIA Custom Tegra.
  • Almacenamiento: 64GB, expandible hasta 2TB con una microSD.
  • Conectividad: WiFi, Bluetooth 4.1 y entrada de audífonos de 3.5mm.
  • Salida de video: Hasta 1080p, vía HDMI a través de la base, o hasta 720p en el modo sobremesa o portátil.
  • Altavoces: Estéreo.
  • Batería: 4,310 mAh, con carga USB Tipo C o a través del dock.
  • Sensores: Acelerómetro, giroscopio y sensor de brillo.
  • Peso: 0.42 kilos, con los Joy-Con acoplados.
  • Colores: Cuerpo negro, con Joy-Con blancos o azul y rojo neón.
Foto: Iván Serna.

LA EXPERIENCIA

A diferencia de Nintendo Switch Lite, el cuerpo de la consola es negro, por lo que únicamente se mantiene en blanco a los Joy-Con, junto al dock.

No pensé que el color blanco fuera tan atractivo, pero al verlo en persona luce impecable. Habrá que ver si con el tiempo cambia a otra tonalidad, pero al menos puedo confirmar que no se ensucia con tanta facilidad.

Además de este nuevo color, la base presenta unos bordes redondeados en la parte superior, que le da una apariencia más bonita al posar en el mueble del televisor.

Foto: Iván Serna.

Detrás, la bisagra que oculta los puertos ahora es removible, para que puedas conectar el adaptador de corriente, el puerto HDMI y además un cable LAN para tener una conectividad mucho más estable. En las otras versiones tenías que comprar un adaptador para poder conectar la consola directamente a tu router, por lo que esto es un añadido muy positivo aunque no tan novedoso.

Al jugar en línea por medio de WiFi, pude notar una leve mejoría en cuanto al alcance de la señal inalámbrica. Nintendo no menciona algún cambio en este apartado, pero lo comprobé con dos Nintendo Switch, la versión original y la 1.1.

Además, la base conserva dos puertos USB 2.0 laterales para conectar a otros dispositivos, como un Pro Controller o algún otro control que quieras recargar.

Respecto al diseño de Switch OLED, la pantalla ahora es más grande, pero las dimensiones de la consola son muy similares a las versiones previas, ya que se redujeron los biseles para ampliar la pantalla OLED hasta las 7 pulgadas. Gracias a esto, los Joy-Con previamente disponibles son totalmente compatibles y encajan bien. 

Foto: Iván Serna.

Detrás, el pequeño y frágil soporte de las Switch anteriores fue reemplazado con un soporte metálico mucho más resistente, amplio y que además se flexiona en diferentes ángulos, por lo que ahora el modo de juego de sobremesa es mucho más cómodo.

También cambió la forma en la que se presenta la ranura para la tarjeta microSD. Hablando de ello, la capacidad de almacenamiento es otra novedad, pues ahora se duplicó a 64GB internos, con la posibilidad de expandirla hasta 2TB con una tarjeta micro SD.

En la parte inferior de la consola podremos apreciar el sistema de altavoces, que también fueron rediseñados para ofrecer una potencia de audio mejorada y que es mucho más inmersiva.

En el interior, como ya sabrás, Nintendo Switch OLED no presenta grandes modificaciones en cuanto a sus capacidades de procesamiento, por lo que no alcanza la tan esperada resolución 4K.

Foto: Iván Serna.

Sin embargo, el modo de juego portátil sí es mucho más placentero con su pantalla OLED, que además de ser más amplia, tiene una mayor profundidad en los colores oscuros, mientras que el resto se muestra más vivo que nunca.

Esto se aprecia mucho mejor si desactivas la función de brillo automático del menú de configuración, pues a través de un sensor, la consola detecta las condiciones de iluminación del entorno y esto impide que muestre el pleno potencial de la nueva pantalla OLED.

Aunque la pantalla es más grande y ofrece un brillo mayor, su tecnología OLED le permite usar la energía de una manera optimizada, por lo que en términos de autonomía esta revisión no dista mucho del modelo 1.1 de Nintendo Switch, que recibió mejoras en su batería.

Dependerá del título, del brillo de la pantalla y de la potencia de audio, entre otros aspectos, pero la autonomía de Nintendo Switch OLED puede durar desde 4 horas y media, hasta 9 horas. Reponer su energía tardará cerca de 3 horas, cuando la consola se encuentra en reposo.

¡LO MEJOR!

Nintendo Siwtch OLED le da un verdadero propósito al modo de sobremesa. Su pantalla de 7 pulgadas, con colores vivos y negros más profundos, además de su soporte metálico con mayor resistencia y ángulos de visualización hacen que jugar en cualquier lado sea todo un deleite, con una mayor capacidad de audio para disfrutar de una experiencia inmersiva, incluso al jugar en exteriores.

Foto: Iván Serna.

LO MENOS COOL...

La ausencia de un cambio radical en cuanto a su desempeño puede desalentar a varios que esperaban renovar su Nintendo Switch. Los Joy-Con incluso son los mismos, no obstante, Nintendo publicó en un blog que poco a poco han mejorado los controles inalámbricos, siendo este modelo el que contiene la mayoría de correcciones. A pesar de ello, mencionan que es inevitable que se genere el desgaste que traiga consigo al malvado ‘drift’.

Foto: Iván Serna.

LO QUE HIZO FALTA

Además del soporte a 4K, que personalmente considero que sería todo un desafío lograr, me gustaría que la consola presentara otras mejoras, como conectividad a WiFi 6, un almacenamiento interno aún mayor y que los biseles de la pantalla sean un poquito más reducidos. Incluso me hubiera conformado con que el cuerpo de la consola fuera blanco para que se viera igual de bonito que los Nintendo Switch Lite.

Foto: Iván Serna.

CONCLUSIÓN

Nintendo Switch OLED no es lo que muchos esperaban, pero tampoco decepciona. Las fotos de esta nota no hacen justicia a lo bello que luce la pantalla, con títulos como Metroid Dread en lo que los escenarios oscuros se ven espectaculares, o en juegos como Mario Kart 8 Deluxe en los que los colores desbordan de vida y brillo.

Además, el soporte metálico es una gran respuesta a la incomodidad constante de las versiones previas con la bisagra endeble y pequeña. Eso, junto al audio mejorado de los altavoces, hacen que Nintendo Switch OLED sea perfecta para el modo portátil, pero sobretodo al sobremesa, que creo que era el menos favorito de todos.

Nintendo Switch OLED

Desde $10,000, en línea
Calificación: 4/5 estrellas 🌟🌟🌟🌟