Suites construidas por pobladores maasai, una cooperativa de hortalizas orquestada por mujeres de la reserva Missol, y un refugio para criar perros locales que serán adoptados por turistas, son algunos proyectos que forman parte de hospedajes que han integrado a comunidades de Kenia, Indonesia, Estados Unidos y México a sus instalaciones.
Campi Ya Zanki
Kenia
Campi Ya Zanki es un campamento de lujo que ha logrado tener servicios de cinco estrellas sin derribar un solo árbol, creando sus suites y casas de campo con gente local maasai.
El lugar ha logrado ofrecer experiencias de hospedaje cómodo, emocionantes aventuras al aire libre, encuentros memorables con la vida silvestre y una conexión auténtica con los lugareños, gracias a la asociación con la comunidad Maasai del Kuku Group Ranch.
El campamento que se ubica frente al Kilimanjaro funciona con energía solar al cien por ciento, tiene un sistema de captación de agua que almacena la poca lluvia que recibe el campamento, y el agua usada se filtra y se bombea a los estanques para mantener la vida silvestre local.
Para cocinar, utilizan carbón ecológico, y los desechos se reciclan siempre que sea posible. Además, los visitantes del campamento contribuyen con una tarifa de conservación, apoyando a una organización que paga a los habitantes locales para que no maten a los leones y leopardos que amenazan su ganado.
Misool Resort
Indonesia
Pocos espacios turísticos pueden jactarse de haber transformado de manera positiva el entorno en el que se encuentran actualmente, así como las actividades que ahí se realizaban.
Es el caso de Misool Resort, ubicado en la isla de Batbitim Misool en Indonesia que hace tiempo albergaba un centro de matanza de tiburones y hoy en día es un espacio de conservación de coral que recibe a turistas y submarinistas en búsqueda de más contacto con la naturaleza.
La economía que antes satisfacía a la feroz demanda de aleta de tiburón como ingrediente principal de una afamada sopa, ha cambiado y ahora se sostiene de una cooperativa de verduras dirigida por mujeres que surte de estos productos al complejo turístico.
Además de la creación de la Reserva Marina Misool, de más de 120 mil hectáreas que son vigiladas las 24 horas por trabajadores que antes fueron cazadores y pescadores furtivos.
Los bungalós de estilo balinés del complejo están hechos de madera de deriva y materiales locales, bajo los cuales hay tortugas comiendo algas, peces, almejas y mantarrayas.
Los jardines hidropónicos, el tratamiento natural de aguas residuales, el parque solar también completan el interés por la sostenibilidad que tiene el espacio.
Inn By the Sea
Maine, Estados Unidos
Disfrutar de las playas de Portlant en Maine no sólo te dejará un descanso en uno de los resorts mejor ubicados de la zona, también apoyarás al desarrollo de la comunidad local, debido a las asociaciones que sostienen con granjas y pescadores locales.
Inn By the Sea también tiene asociación con el Instituto de Investigación del Golfo de Maine para ofrecer educación al personal sobre las especies comestibles menos conocidas que abundan en el Golfo de Maine.
Ha implementado distintos programas de jardinería en su propio jardín y ha creado una sociedad con el refugio de animales local para criar perros, en el que el personal de turno cuida a un perro hasta que encuentran la pareja perfecta en un huésped.
Las comidas con productos locales en el restaurante Sea Glass, están llenas de opciones veganas y mariscos frescos y subutilizados sostenibles del Golfo de Maine.
Los huéspedes están rodeados de jardines nativos que brindan alimento y hábitat para la vida silvestre, cuentan con un programa en el que sábanas y toallas está diseñados para proteger a la mariposa monarca en peligro de extinción y financían la restauración del hábitat del conejo de cola de algodón de Nueva Inglaterra que también está amenazada.
Hotel con Corazón
México
14 habitaciones con decoraciones coloridas y productos oaxaqueños.
Verduras y frutos provienen de proveedores locales.
Parte de las ganancias del hotel son donadas en pro de la educación de niños de la comunidad.
En el corazón del centro de Oaxaca, a sólo 15 minutos de la plaza central, se encuentra un proyecto de hospedaje con trasfondo social llamado Hotel con Corazón.
El alojamiento boutique de apenas 14 habitaciones realiza inversiones con sus ganancias para impulsar la educación de la niñez local.
En su cocina ofrece clases que cubren comida de 4 regiones diferentes de Oaxaca, respetando las tradiciones gastronómicas e ingredientes de la sierra mazateca, la mixteca alta y baja, la costa y por supuesto incluimos los Valles Centrales.
Corazón Impact Tour que se apoya en la población local, que ofrece distintas experiencias en las que destacan la cultura y las tradiciones locales, como la cosecha de mezcal y visita a ruinas arqueológicas.
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