Al examinar un empaque de alimento para mascotas, el principal apartado a leer debe ser la lista de ingredientes, que se enlistan en orden descendente por peso, explica Laura Barceló, nutrióloga veterinaria de Yin Yang Pet Care.
Como primer ingrediente aconseja proteínas de origen animal, en especial las que aparecen como “carne de” o el nombre de la proteína (“pollo”, por ejemplo) porque casi no fueron procesadas. Siguen, en orden de calidad, aquellas escritas como “harina de carne de”, “subproducto de” y “harina de subproducto de”. La experta en nutrición sugiere evitar las últimas dos.
Asimismo, exhorta a no elegir, de preferencia, productos en los cuales sea visible maíz quebrado. Según el American Kennel Club (AKC), ingerir elotes (sin cocinar) es una causa común de obstrucciones intestinales porque los canes no pueden digerir fácilmente dicho cereal crudo.
También insta a evitar alimentos con los conservadores BHA y BHT. Un artículo publicado en la revista “Nutrición Clínica en Medicina” en 2023 apunta que han sido descritos como potenciales carcinogénicos en animales de experimentación.
Ya que los alimentos secos contienen entre 0.1 y 0.4 por ciento de sal añadida, cualquier ingrediente anotado después de ella podría no beneficiar a las mascotas, tanto como se anuncia en los empaques, agrega Barceló.
Otro rubro al cual prestarle atención es el de análisis garantizado, que indica la composición de macronutrientes, como fibra y grasa. Generalmente, no señala el porcentaje de carbohidratos, pero una medida indirecta para medirlos son los elementos o extractos libres de nitrógeno (ELN).
Barceló recomienda que el porcentaje de carbohidratos sea inferior a 40 en el caso de alimentos para perros y menor a 30 en la comida para gatos.
“Siempre debe haber el respaldo del médico veterinario especialista en nutrición”, precisa.
Dieta a la medida
Algunas mascotas con alergias, intolerancias alimentarias, enfermedades como diabetes, problemas hormonales y trastornos digestivos llegan a necesitar dietas especiales, ya sea a través de croquetas o preparaciones caseras con distintos ingredientes, comparte Karina Cosío, nutrióloga veterinaria y profesora de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM.
“Cuando se busca (alimentación) alternativa es porque a lo mejor el paciente (…) tiene algunas condiciones particulares”.
Los signos de sospecha más comunes sobre alergias en perros son comezón, irritación, ronchas y problemas frecuentes en oídos. A veces se rascan tanto que se causan sangrados. En los gatos suelen presentarse afecciones digestivas, en especial diarrea tras consumir ciertos alimentos e inconsistencia en las heces, detalla.
Para identificarlas se realizan pruebas de eliminación, que consisten, a grandes rasgos, en suprimir los alimentos sospechosos de causar los síntomas (proteínas generalmente) y luego se reintroducen poco a poco en busca de cualquier reacción.
“(Hay que) ir acompañado de alguien que te vaya explicando en el camino qué cambios se van requiriendo porque, también como en uno, la nutrición del perro y del gato tiene etapas. Los pacientes van teniendo cambios en sus necesidades conforme crecen, envejecen (…) o si van detectando alguna enfermedad”, comenta Cosío.
Premios y snacks
De acuerdo con Barceló, pueden darse a las mascotas:
- Pedazos de jícama, manzana, melón, papaya, pera y sandía.
- Incluso mango y plátano, pero con moderación por su alto contenido de azúcar.
- Pequeñas porciones de proteína animal, como huevo cocido, carne de pollo o res.
- Galletas de harina de avena, trigo u otro cereal, recomienda máximo una al día.
- En sustitución de un poco de su alimento regular para evitar que suban de peso.
Croquetas para perros
Consulta los resultados del análisis que la Profeco realizó en 2023.
