En tanques estacionarios:

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Algunos consejos a la hora de llenar tu tanque es primero conocer su capacidad, para casa habitación los más comunes son de 120, 180 y 300 litros.

Previo a que el gasero te haga la carga del energético, es importante fijarse en el porcentaje de carga que marca el tanque, y de esa manera pidas que carguen un porcentaje y verificar que al finalizar tu porcentaje de carga sea el correspondiente.

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Por ejemplo: si tienes un tanque de 180 litros y previo a la carga el medidor te dice que tienes un 20 por ciento, significa que tiene, aproximadamente, unos 36 litros, por lo que si pides que te carguen 90 litros (lo equivalente a la mitad o al 50 por ciento de la capacidad de tu tanque), al finalizar tu tanque deberá marcar un porcentaje equivalente al 70 por ciento.

De llegar a un porcentaje menor, será necesario aclararlo con tu proveedor y presentar tu queja ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

En cilindros:

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La manera de calcular que te den un tanque con la cantidad adecuada es conociendo tu consumo, por ejemplo, si un cilindro de 20 kilos te dura, en promedio, un mes y medio, y al cambiar de suministrador un tanque de la misma cantidad te dura solo un mes, eso será señal de que no tenía la cantidad completa.

Ante dicha situación, será importante reportarlo ante el proveedor y denunciar ante Profeco.

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¿Y la seguridad?

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El gas LP, al igual que cualquier otro combustible inflamable, debe tratarse con precaución para evitar accidentes. Aquí tienes algunas sugerencias:

Fuentes: Profeco, Maya Gas, Gas Noel
Realización: Diana Gante
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