¿Quién es él?

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Grupo Alemán y el nacimiento de Interjet

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De la mano de su padre, Alemán Magnani creó en 1999 el conglomerado Grupo Alemán, conformado por empresas de aviación, comunicaciones, minería, entretenimiento, inmobiliario y energía.

Una de esas empresas es Interjet, que fundó en 2005 y en la cual ocupó el cargo de vicepresidente hasta 2020, cuando el empresario Alejandro Del Valle adquirió más del 90 por ciento de las acciones de la compañía.

La aerolínea tomó fuerza luego de la quiebra de Mexicana de Aviación en 2010, pues aprovechó para adquirir sus rutas y contratar a sobrecargos y pilotos que ya contaban con las certificaciones y permisos necesarios para volar.

Interjet llegó a ubicarse entre las tres aerolíneas con mayor participación en vuelos nacionales e internacionales y en 2018 alcanzó su mayor número de pasajeros, con 13 millones 880 mil.

Sin embargo, hoy Interjet busca salvarse a través del concurso mercantil, proceso en el que hará frente a su deuda de alrededor de mil 250 millones de dólares.

El descenso de Interjet

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Pese a que en 2018 todavía registró un incremento en el total de pasajeros que transportó, la mala situación financiera de Interjet ya era evidente a nivel interno.

Desde ese año, la aerolínea volaba en medio de una tormenta perfecta: empezó a enfrentar problemas por la reducción de su flota de aviones rusos Sukhoi Superjet 100, incrementó su deuda, fue presa de una mala estrategia operativa y, finalmente, la crisis provocada por la pandemia actual le dio el tiro de gracia.

En 2018, por instrucciones de la autoridad aeronáutica de Rusia, tendría que realizar una inspección extraordinaria a sus 22 aviones rusos debido a una falla de origen y a finales de ese año tuvo que cancelar vuelos por tener en tierra 11 de estos equipos.

“Este fue el inicio de una serie de factores desafortunados para la empresa, obviamente ha sido un factor (de varios)”, dijo el año pasado Marco Montañez, analista de aviación de Vector Casa de Bolsa.

Además, su mala situación empezó a evidenciarse ese año con mal manejo de personal, estimaciones erróneas de capacidad, hasta falta de bebidas y alimentos a bordo de aviones, según ex trabajadores de la compañía.

En ese año, despidió a más de mil trabajadores por reducción de flota, pero gran parte de ellos fueron recontratados después, como parte de una estrategia que no resultaría exitosa.

William Shaw, que llegó como director general de la empresa en 2019, inició la operación de nuevas rutas a destinos internacionales como Quito y Guayaquil, en Ecuador, por lo que se requirieron más aviones y, en consecuencia, más personal.

La apuesta no funcionó, porque los aviones de esas nuevas rutas internacionales no se llenaban, ya que la ocupación era de apenas 60 por ciento, y sólo agravó más la situación de Interjet.

Además, la empresa siguió teniendo problemas con sus operaciones porque Shaw estimó una capacidad de personal mayor a la existente, lo que provocó problemas en la operación como demoras en vuelos.

El año pasado se supo que desde 2018, Interjet no pagaba impuestos al Servicio de Administración Tributaria (SAT), quien decretó 20 embargos contra la empresa entre febrero y julio de 2020 por incumplimiento de pago de impuestos de 2017, 2018 y 2019. La estimación es que la deuda asciende a 2 mil 900 millones de pesos.

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En 2020, los directivos de Interjet todavía se negaban a aceptar que la empresa enfrentaba problemas financieros, pero la pandemia del Covid-19 provocó una crisis sin precedentes en la aviación mundial y en poco tiempo, terminó por agravar la condición de la compañía.

En la segunda mitad del año pasado, la aerolínea empezó a cancelar vuelos porque no contaba con suficientes recursos para pagar el combustible necesario para operarlos.

Paralelamente, había dejado de pagar salarios y prestaciones laborales a sus empleados.

El 13 de julio de 2020, Interjet informó que un grupo de inversionistas, encabezado por el ex banquero Carlos Cabal Peniche y Alejandro Del Valle, había realizado una inyección de capital de 150 millones de dólares para salvar a la empresa.

Para noviembre Cabal Peniche informaba el retiro de su participación en Interjet, con lo que Del Valle quedó al frente de la empresa.

La situación de la compañía se volvió insostenible hasta que finalmente paró operaciones de forma indefinida el 11 de diciembre pasado.

Menos de un mes después, sus cerca de 5 mil colaboradores estallaron una huelga por el impago de ocho quincenas y prestaciones como vales de despensa y aguinaldos.

Incluso la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) llamó a los consumidores a unirse a una demanda de acción colectiva en contra de la empresa por la cancelación de vuelos.

Este año, Alejandro del Valle, actual presidente de la compañía, volvió a los reflectores y confirmó que Interjet no tenía otro camino que ir a concurso mercantil para hacer frente a la deuda de alrededor de 120 millones de dólares que arrastra.

Del Valle estimó que la empresa estaría en concurso mercantil en marzo pasado, pero actualmente la línea aérea está a la espera de que una jueza determine si arranca de inmediato este proceso o se somete al análisis de un visitador del Instituto Federal de Especialistas de Concursos Mercantiles (Ifecom) para determinar si debe hacerlo o no.

Este 8 de julio, un juez federal ordenó la aprehensión de Alemán Magnani por una presunta defraudación fiscal de 66 millones 285 mil 195 pesos, en su calidad de vicepresidente de Interjet.

Radiópolis, otra polémica

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El rescate de Interjet encabezado por Cabal Peniche y Del Valle no fue el único, estos empresarios también salvaron, de manera indirecta, la venta de Radiópolis, propiedad de Televisa, a Miguel Alemán Magnani.

En julio de 2019, Corporativo Coral, otra empresa de Grupo Alemán, y Televisa anunciaron la transacción, que comprende 17 estaciones de radio por mil 248 millones de pesos, sin embargo, en octubre del mismo año, la televisora acusó incumplimiento de los Alemán.

El incumplimiento, dijo en aquél entonces Televisa, fue porque presuntamente no se realizó el pago inicial de 32 millones de dólares, por lo que tomaría acciones legales por ello. Meses después mujeres ligadas a Cabal Peniche y Del Valle entraron al rescate.

Teresa Pasini, esposa de Cabal Peniche; Samantha del Valle, hija del ahora líder de Interjet, y Rosa María Rubio, viuda de Carlos Aguirre Gómez, ex director de Grupo Radio Centro; aportaron capital para pagar los mil 248 millones de pesos acordados con Televisa por la mitad de Radiópolis. El otro 50 por ciento pertenece al español Grupo Prisa.

La operación también implicó el pago de un dividendo por 285.6 millones de pesos.

Desde entonces, los mexicanos y Prisa sostienen un litigio legal por el poder de Radiópolis, que concentra 17 estaciones de radio.

Cabal Peniche se quedó con el 90 por ciento del 50 por ciento mexicano de Radiópolis, el resto de esa mitad le pertenece a Alemán Magnani.

En el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) se han realizado trámites para que la parte que está en manos mexicanas pase al poder de Pasini.

Presente hasta en... ¡Netflix!

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Alemán Magnani es un amigo cercano del cantante Luis Miguel, como resultado de esa amistad, el empresario se lanzó como coproductor de la serie biográfica del artista, que Netflix produce y tiene ya tres temporadas.

Realización: Azucena Vásquez y Ailyn Ríos
Fuentes: Empresas, Profeco, Sat, IFT
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