UN VISIONARIO PRECOZ

Elon Reeve Musk nació en Pretoria, Sudáfrica, el 28 de junio de 1971.

Durante su infancia sufrió acoso escolar y sus padres se divorciaron, por lo que se mudó con su papá junto con su hermano menor Kimbal Musk.

Con sólo 12 años, Musk vendió en 1983 un juego llamado “Blastar” a una revista de informática por 500 dólares.

Más tarde se mudó con su madre y hermano a Canadá, donde estudió dos años en la Universidad de Queen en Kingston y después terminó sus estudios de física y económicas en la Universidad de Pensilvania.

En la década de 1990, en el auge de las puntocom, inició con su hermano Kimbal un negocio de internet llamado Zip2, la cual ayudaba a que los periódicos se pusieran en línea y en 1999 fue vendida a Compaq Computer, con lo que Musk consiguió 22 millones de dólares a los 27 años.

Con el dinero que obtuvo de la venta, Musk compró un McLaren en un millón de dólares y el resto lo invirtió en X.com, ahora PayPal, la cual adquirió eBay en 2002, y por la que el multimillonario ganó 165 millones de dólares como accionista.

La mayor parte de esos nuevos ingresos se destinaron a Space Exploration Technologies, también conocida como SpaceX, fundada en 2002, que en 2021 fue valorada en cerca de 100 mil millones de dólares. 

Tras el éxito, la compañía ha ganado contratos con la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio, incluido un acuerdo para construir una nueva cápsula para llevar astronautas a la luna.

En 2003,  Martin Eberhard y Marc Tarpenning fundaron Tesla, a donde un año después Musk se unió como inversionista, con 70 millones de dólares, y ayudó a desarrollar su primer auto, el Roadster, que fue lanzado en 2006.

Tesla comenzó a cotizar en la bolsa en 2010 con un precio de 17 dólares la acción.

El primer automóvil de producción de alto volumen, el Model S, comenzó a distribuirse en 2012. El deportivo Model X se lanzó en 2015, y el Model 3, el más vendido, llegó en 2017.

 

Tesla salió a bolsa en 2010 a 17 dólares la acción con una capitalización de mercado de 1,330 millones de dólares. Esa valuación excedió un millón de millones de dólares el año pasado, antes de caer a unos 700 mil millones de dólares más recientemente.

En 2016, Tesla gastó 2,100 millones de dólares en la compra de SolarCity, empresa que instala paneles solares residenciales en la que Musk era accionista y que fue fundada por dos de sus primos.

En 2017, creó Neuralink, compañía que intenta fabricar dispositivos para implantarse en el cerebro y ayudar a personas con parálisis a caminar de nuevo. 

También fundó Boring Company cuya misión es excavar túneles subterráneos y alrededor de las ciudades para contrarrestar el tráfico y conducir a gran velocidad, y que vendió un lanzallamas al público en 2018.

Musk también ha causado sensación en las criptomonedas, pues Tesla y SpaceX han invertido en bitcoin, aunque sus comentarios sobre su impacto ambiental provocaron cambios de precios. 

Recientemente y tras varios meses de negociación, el millonario completó la compra de Twitter, por 44 mil millones de dólares.

Luego de la adquisición, se desataron diversas polémicas, pero esta no es la primera vez que el empresario está en controversia.

ENCENDIENDO LA POLÉMICA

Indigna con plan de paz

A principios de año, Elon Musk proporcionó a Ucrania acceso a Internet mediante Starlink y financió una parte del hardware y el servicio, equipando así a civiles y soldados con un medio de comunicación durante la invasión rusa.

Sin embargo, recientemente publicó en Twitter que no podía financiar “indefinidamente” el uso de Starlink en Ucrania, y después cambió repentinamente su opinión.

A finales de septiembre, Musk acudió a Aspen, Colorado, al evento privado llamado The Weekend, organizado por el ex director ejecutivo de Google y asesor gubernamental Eric Schmidt y que reunió a líderes empresariales y políticos de Estados Unidos.

Durante la reunión, Musk propuso un plan de paz para la guerra en Ucrania que permitiría a Rusia anexar zonas ucranianas, lo que indignó a muchos en el evento.

Diez días después reveló su plan en Twitter. El Kremlin apoyó públicamente la idea, pero Volodymyr Zelensky, Presidente ucraniano, y sus asesores la reprocharon.

Poco después, el director ejecutivo de SpaceX anunció que continuaría financiando la red de internet Starlink en Ucrania.

Conflictos con Irán

Elon Musk se metió en problemas con Irán mientras estaba en Aspen presentando su plan de paz.

Conforme aumentaban las protestas contra el Gobierno en Irán, las autoridades bloquearon el acceso a internet en unas zonas.

Fue entonces que Musk dijo “Activando Starlink” en un mensaje de Twitter, con lo que ofrecía la posibilidad de eludir la restricción de la conexión.

Sin embargo, muchos iraníes se dieron cuenta y Musk ya no cumplió la promesa. Tampoco mencionó nada sobre lo que necesitaba para poner en marcha el plan, cuánto tiempo requería y por qué las restricciones de Irán complicarían el servicio.

Expertos en derechos digitales en Irán señalaron que algunos hackers comenzaron una campaña de phishing enviando enlaces que afirmaban dar acceso a Starlink.

Tensión con Taiwán

El conflicto entre China y Taiwán supone un inconveniente para Musk debido a que en Shanghái Tesla cuenta con una planta que produce hasta el 50% de los autos. 

El Gobierno chino tiene un control estricto de cómo operan las empresas occidentales en el País y algunos expertos han expresado su preocupación sobre cómo esto puede afectar las posiciones políticas de Musk.

En octubre, el empresario confirmó que tuvo presiones de Beijing debido a que China desaprobó que ofreciera el servicio de Internet Starlink en Ucrania.

Luego Musk le dijo al Financial Times que Taiwán debería aceptar dar parte del control a China, comentario que rompe con su política y causó condenas por parte de políticos.

Chao Tien-Lin, miembro del Partido Democrático Progresista de Taiwán, pidió a Musk que se retractara de su declaración, en una entrevista para The New York Times.

 

Si no lo hace, aconsejaré sinceramente no solo a Taiwán sino a todos los consumidores en los países democráticos liberales que boicoteen a Tesla y sus productos relacionados”, dijo.

Los cambios radicales en Twitter

Tras meses de incertidumbre sobre su compra, Elon Musk por fin adquirió Twitter y aseguró que era para ayudar a la humanidad y que no quería que la plataforma se convirtiera en “un infierno de todos contra todos”.

Además, anunció que la plataforma cobraría 8 dólares al mes a las cuentas verificadas, a cambio de prioridad en apariciones y menos anuncios 

Previamente había trascendido que el costo sería de 20 dólares, por lo que algunos usuarios como el escritor Stephen King, cuestionaron la intención de Musk.

“¿Veinte dólares al mes para mantener mi insignia azul? ¡Joder, deberían pagarme! Si eso se instituye, me iré”, advirtió el estadounidense.

En respuesta, Musk planteó una tarifa más baja.

“¡Tenemos que pagar las cuentas de alguna manera! Twitter no puede depender completamente de los anunciantes. ¿Qué tal 8 dólares?”, tuiteó.

Hasta este jueves, también diversas compañías detuvieron temporalmente su publicidad en la red tras las polémicas con Musk y por incertidumbre ante salida de directivos.

Este viernes, empleados de Twitter en el mundo, incluyendo México, fueron bloqueados de sus cuentas de trabajo como parte del recorte emprendido por Musk, quien presuntamente planea despedir a unos 3,700, la mitad de la fuerza laboral de la compañía.

En 2018, durante el programa de podcast de Rogan, Elon Musk compartió un cigarro de mariguana y tabaco con el comediante Joe Rogan.

El empresario lo fumó y bebió whisky en una amplia charla que sostuvo. Poco después de que se emitió el podcast, accionistas de Tesla se mostraron indignados y el precio de la compañía cayó en la bolsa.

La NASA investigó a la empresa SpaceX y algunos empleados se quejaron de Musk y dejaron la organización.

Fan de las familias numerosas

En diversas ocasiones, Elon Musk ha hablado sobre su preocupación de que las familias no están procreando lo suficiente.

En julio pasado, luego de que en noviembre tuvo gemelos con Shivon Zilis, directora de Neuralink, el multimillonario tuiteó:

“Haciendo mi mejor esfuerzo por ayudar a la crisis de despoblación. El colapso en la tasa de natalidad definitivamente es el mayor peligro que enfrenta la civilización”.

“¡Espero que tengan familias grandes y felicidades a los que ya las tienen!”, añadió.

Con información de WSJ.