Cuando los Centros de Integración Juvenil detectaron que había jóvenes consumidores constantes o moderados de sustancias, pero que no necesitaban un internamiento, crearon los Centros de Día, un modelo en el que los pacientes acuden de 8:30 a 17:00 horas, de lunes a viernes.
“Había jóvenes que estaban consumiendo sustancias, y adultos también, que (según evaluaciones médicas) no eran candidatos a un internamiento, pero la consulta externa tampoco era suficiente”, explica Martha Leal, la directora de CIJ Guadalupe.
“Venían a su terapia de psicología una vez a la semana, pero sus familiares se iban a trabajar y ellos se quedaban solos en casa porque estaban sin trabajo o habían desertado de la escuela. Se salían a la calle y estaban más vulnerables a recaídas”.
En los Centros de Día realizan actividades que van desde terapias de grupo hasta las deportivas y culturales, como clases de guitarra e incluso académicas (como lectura y redacción), para quienes lo necesitan. También trabajan en la creación de un plan de vida.
La familia es incluida en el tratamiento, al participar en una terapia que es de dos a tres veces por semana. Este modelo intermedio es único, y en Nuevo León se ofrece sólo en los CIJ de Guadalupe y Monterrey.