Para el día de la unión, Victoria Oliva encabezó la ceremonia, la cual fue personalizada y tanto Andrés como Paola se dedicaron unas emotivas palabras.
“Llevábamos tanto tiempo de planearlo y soñarlo que no sabía qué esperar, no teníamos ninguna expectativa, pero fue increíble. No quisimos una unión religiosa, fue simbólica y me encantó porque significó confirmar y celebrar algo que poco a poco hemos construido”, explicó el financiero.
“La encargada de presidirla es nuestra amiga, nos entrevistó por separado antes para entendernos mejor; fue muy importante para nosotros que lo hiciera alguien que nos conoce. La verdad, fue chistoso que sí me puse un poco nervioso, he estado en mil foros y no me da pena hablar en público por mi trabajo, pero ahí me ganó la emoción”.