En cuanto a las prótesis, principalmente se usan en atletismo. Estos dispositivos, que pesan desde 540 gramos para pacientes amputados por debajo de la rodilla o hasta 1.7 kilogramos si la amputación es por arriba de la rodilla; tienen un encaje al muñón (socket) prácticamente idéntico al del día a día, con un poco más de protección en torno al muñón y más blando.
Estas prótesis tienen un blade (pie deportivo), que no simula un pie convencional, sino que se trata de una lámina de fibra de carbono con un diseño en forma de C para atrás. Esas láminas permiten hacer la impulsión hacia delante, es decir, no simulan el movimiento normal de una pierna, donde la pisada se da desde el talón hacia la punta del pie, sino que simulan una corrida donde se usan las puntas de los pies ya que pueden llegar a recibir una fuerza de 3 o 4 veces el peso corporal del atleta, es decir, en cada zancada, son más de 250 kilogramos encima de una lámina.