¿QUIÉN ES?

  • Licenciado en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México y maestro en derechos humanos y democracia por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Gómez Trejo fue nombrado por Alejandro Gertz Manero como Fiscal del Caso Iguala el 26 de junio de 2019.

 

  • A nivel internacional, trabajó en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) en México, Honduras y Guatemala.

 

  • Conocía las investigaciones de la desaparición de los normalistas, desde antes de llegar a la FGR, porque fue secretario ejecutivo del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la CIDH, desde donde cuestionó abiertamente la versión oficial del Gobierno federal anterior, la que denominan “verdad histórica”.

LAS ÓRDENES CANCELADAS

Su salida ocurre al cumplirse el octavo aniversario de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y de que la FGR se desistiera de 21 de las 83 órdenes de aprehensión libradas el mes pasado contra presuntos implicados en este crimen, una decisión que favoreció a 16 miembros del Ejército.

El desistimiento favoreció a militares, entre ellos al Coronel Rafael Hernández Nieto, entonces comandante del 41 Batallón de Infantería en Guerrero, además de otros ex funcionarios estatales como el ex Procurador de Guerrero, Iñaky Blanco.

El juez federal Enrique Beltrán Santés giró los mandamientos de captura por pedido de la Fiscalía de Gómez Trejo, el pasado 19 de agosto, pero otra oficina de la FGR, distinta a la suya, promovió la cancelación. Gómez Trejo no fue consultado y avisado previamente de esta maniobra, aseguran.

CASO MURILLO KARAM

Otra decisión que empujó a su dimisión, según funcionarios, es que la FGR solicitó la orden de aprehensión del ex Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, sin consultárselo y sin avisarle.

El pasado 19 de agosto Gómez Trejo se enteró por sorpresa de la captura del ex titular de la PGR, pues en ese momento se encontraba en Tel Aviv, gestionando con la Fiscalía de Israel la posible entrega de Tomás Zerón de Lucio, ex jefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).