ARIZONA, EU
Este llamativo destino de Estados Unidos promueve un alto espíritu de conservación. Arizona, por ejemplo, te propone la visita a sus sitios icónicos siguiendo ciertas recomendaciones al momento de estar al fresco (sugerencias que van desde quedarse dentro de los senderos o recoger la basura, hasta tener cuidado con el fuego, todo lo que en conjunto llaman “leave no trace” o no dejes rastro).
Dentro de sus opciones en geoturismo presumen una ruta por varias comunidades artísticas donde además es posible disfrutar de actividades al aire libre como Clarkdale, Cottonwood, Camp Verde, Jerome and Sedona. En Cottonwood, por ejemplo, está la posibilidad de hacer la Ruta del Vino o pasear en bicicleta por las escarpadas veredas de la zona.
GRENOBLE, FRANCIA
Es considerada como la ciudad participativa y sustentable por antonomasia. Posee un sistema de transporte casi 100 por ciento verde, así como un poco de ambos mundos del turismo: un ajetreado paisaje urbano y un calmo escenario rústico, todo a unas tres horas de París, en la región de Rhone-Alps. Esta ciudad es famosa por su teleférico amigable con el ambiente que lleva hasta la Bastille, fortaleza militar del siglo 19, lugar desde donde se puede visualizar tanto la ciudad como la campagne française.
BIÓSFERA DE CALAKMUL, MÉXICO
Este maravilloso sitio resguarda muchas joyas, una de ellas es su pintoresco y angosto camino que conduce hacia la zona arqueológica del mismo nombre, además de sus otros 38 sitios históricos de entre los que destacan Chicanná y Becán (célebre por su foso circundante). En esta área abundan los senderos intrincados donde es posible caminar sin “dejar rastro”, así como estancias rústicas en los que el visitante podrá capturar la belleza de la flora y fauna locales.
CANBERRA, AUSTRALIA
Ubicada al extremo norte de los Alpes Australianos es quizá la ciudad que más hace por el medio ambiente, con casi 48 por ciento de su energía proveniente de fuentes limpias. Ahí es posible acercarse a las montañas con nieve en invierno, contemplar al cityscape o visitar el Arboreto Nacional, donde se pueden apreciar infinidad de especies endémicas de cedros y pinos. A todo se puede acceder por medio de transportes limpios y allí se realizan las actividades más saludables que existen al aire libre.
WELLINGTON, NUEVA ZELANDA
Ha sido señalada como una de las ciudades con menos contaminación en el mundo, ya que posee ciertos encantos y transportes como el funicular que va del distrito de negocios de Lambton Quay a Kelburn, un suburbio con una considerable altitud desde donde se aprecia la ciudad.
En esta capital se encuentran diversos medios ecológicos de transporte como el Matangi, tren eléctrico que conecta con el Upper Hutt, una región que combina lo suburbano con el ambiente rural de parques y reservas a las que se puede llegar en infinidad de medios verdes como la bicicleta, a pie o en otras líneas de tren.
NAIROBI, KENIA
Es conocida como la “Ciudad Verde en el Sol” y es que no sólo presume una infinidad de programas ecológicos, sino que se encuentra en la coyuntura de la jungla keniana con la sabana, mientras varios ríos la bañan desde diversos ángulos. Además, la ciudad cuenta con una infinidad de parques, arboretos, espacios verdes y sinfín de árboles, sin omitir el hecho de que Kenia impulsa el transporte sostenible y las actividades libres de emisiones como las caminatas en sus parques nacionales. En el Hell’s Gate se recomienda el uso de la bicicleta.