¿Cuándo surgen?
Este esquema surgió en 1992, bajo la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica, esto porque la empresa estatal no contaba con la capacidad de cubrir la demanda de los grandes consumidores.
Esto permitía la instalación de una central, que mayoritariamente eran de ciclos combinados, las cuales vendían la energía a sus clientes establecidos en la sociedad de autoabasto.
Empresas como Iberdrola, Enel, Saavi, Mitsui, entre otras, instalaron este tipo de centrales.
Actualmente existen 243 plantas bajo este esquema, con una capacidad de 11 mil 947 megawatts y generan el 15 por ciento de la energía que se consume en el País, según datos al cierre de 2021.
¿Cuál es el conflicto con CFE?
La empresa estatal ha acusado a estas centrales de ser ilegales por no pagar el uso de las redes de transmisión y por considerar que han formado un mercado paralelo al que existe actualmente.
Además, las acusan de “robarles” a los grandes consumidores de energía, quienes en realidad tienen la opción de decir con quién contratar su suministro eléctrico.
La Comisión acusó que entre 2017 y octubre de 2021 ha perdido 28 mil 96 millones de pesos por los clientes que no pagan la red.
Sin embargo, empresas que son autoabastecidas por privados, como Oxxo o Walmart, y que han sido blanco de señalamientos tanto en la conferencias mañaneras del Presidente Andrés Manuel López Obrador como por la CFE, aseguran que no utilizan un esquema ilegal y que sí pagan lo justo por el suministro eléctrico.
¿Y realmente son ilegales?
Aunque CFE dice que ese esquema no está permitido y es un mercado paralelo, la realidad es que la reforma energética de 2013, cuando se buscó migrar a un esquema de mercado abierto para el sector eléctrico, se estableció el fin de los autoabastos.
Eso significa que ya no serían entregados nuevos permisos bajo esa figura, pero los que ya existían seguirían vigentes hasta la fecha en la que venciera su permiso, y en ese momento, para seguir operando, deberían migrar a un permiso de generación bajo las reglas de mercado, así hasta que todas las centrales se incorporarán al nuevo régimen.
¿Qué pasará con la reforma?
El pasado 30 de septiembre, el Ejecutivo presentó una iniciativa de reforma constitucional en materia eléctrica, donde uno de los cambios principales es la cancelación de todos los permisos de generación privados, tanto vigentes como en lista de espera.
Lo anterior implicaría que los consumidores privados ya no podrían comprar energía directamente a otro privado y solo podrían hacerlo con la CFE.
Mientras que esas plantas de generación privadas solo podrían vender a la empresa estatal, sin embargo, han dicho que a las centrales de autoabasto “ilegales” no se les comprará la energía, de manera que los proyectos quedarían en un “limbo” operativo y regulatorio, porque no existe claridad sobre el criterio para declarar que una centran opera al margen de la ley.
Es decir, el futuro de estas plantas, que permiten a las empresas e industrias acceder a energía más barata, está en manos de la Cámara de Diputados, que el próximo domingo votará la reforma.
Fuentes: LSPEE, CFE, OXXO, Iniciativa reforma constitucional 2021
Realización: Diana Gante
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