LA PRESA KAJOVKA

La presa, sobre el río Dniéper y a 150 kilómetros de la central nuclear de Zaporiyia, se encuentra ahora en la línea de frente entre las regiones controladas por Moscú y el resto de Ucrania.

El dique de la presa, hecho de hormigón y tierra, tiene 16 metros de altura y 3 mil 273 metros de longitud. Es una de las mayores infraestructuras de este tipo en Ucrania.

La potencia de la central hidroeléctrica es de 334,8 megavatios, según la operadora ucraniana, Ukrgidroenergo.

Construida en 1956 durante la época soviética, la represa hidroeléctrica de Kajovka permite enviar agua al canal de Crimea del Norte, que arranca en el sur de Ucrania y atraviesa toda la península de Crimea, ocupada y anexionada por Moscú desde 2014.

Río arriba de la estructura se encuentra el embalse de Kajovka, un depósito de agua artificial formado en el río Dniéper, de 240 kilómetros de largo y hasta 23 kilómetros de ancho.

LAS CONSECUENCIA PARA CRIMEA

La destrucción de la represa podría causar importantes dificultades en el abastecimiento de agua de Crimea, un territorio que Kiev quiere recuperar.

El incidente inundó varios pueblos total o parcialmente, según las autoridades ucranianas, que denunciaron “un crimen de guerra” de Rusia.

“El objetivo de los terroristas es evidente: crear obstáculos para las acciones ofensivas de las fuerzas armadas ucranianas”, estimó Mijailo Podoliak, consejero de la Presidencia.

Las autoridades instaladas por Moscú en la región de Jersón, en el sur de Ucrania, acusaron por su lado a Kiev de haber llevado a cabo “múltiples ataques” en la represa.

El Gobernador de Jersón había dicho el jueves que 600 kilómetros cuadrados de la región estaban bajo el agua-la mayor parte en el lado del río ocupado por Rusia- y que casi 2 mil personas ya habían abandonado las zonas afectadas.

Por su parte, las autoridades nombradas por Rusia desde la invasión de Ucrania, informaron que 4 mil 500 residentes ya fueron evacuados y que cinco personas murieron ahogadas cuando llevaron a pastar a su ganado.

El pasado octubre, en un momento de intensos combates en la zona durante una exitosa contraofensiva de Kiev, el Presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, acusó a las tropas rusas de haber minado la represa y las unidades de la central. 

El operador nuclear de Ucrania, Energoatom, dijo que el daño a la represa “podría tener consecuencias negativas” para la planta de energía nuclear de Zaporiyia , que es la más grande de Europa, pero escribió que por ahora la situación es “controlable”.

¿RUSIA ES RESPONSABLE?

John Kirby, vocero del Consejo de Seguridad Nacional, dijo que Estados Unidos ha estado monitoreando los efectos de la destrucción de la represa Kajovka, pero que no podía confirmar los reportes noticiosos de que Rusia era responsable.

“No podemos decir de manera concluyente qué sucedió y ciertamente compartiremos más información cuando podamos. Lo que está claro, y lo que podemos decir absolutamente, es que el daño al pueblo ucraniano y a la región será significativo”.

Algunos analistas militares advirtieron sobre intentar culpar por la destrucción de la represa con información limitada. “Es demasiado pronto para decir si se trata de un acto deliberado de Rusia o el resultado de una negligencia y un daño previo infligido a la represa”, dijo Michael Kofman, director de estudios rusos en CNA, un instituto de investigación en Arlington, Virginia. 

Los expertos dijeron anteriormente que la presa estaba en mal estado, lo que también podría haber provocado la ruptura.

AUMENTO DEL NIVEL DEL AGUA

El nivel del agua en la ciudad inmediatamente adyacente a la presa dañada podría subir hasta 12 metros, dijo el Alcalde designado por Rusia, Vladimir Leontyev.

Un video mostraba cómo el agua atravesaba los restos de la presa.

personas que viven en 14 asentamientos de la región ucraniana de Jersón, en el sur del país, corren el riesgo de sufrir inundaciones, según la agencia de noticias rusa RIA, que citó al jefe regional nombrado por Moscú.
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La ruptura de la presa se produjo cuando Ucrania se prepara para lanzar su tan esperada contraofensiva, para expulsar al Ejército ruso del territorio que ha tomado durante más de 15 meses de lucha.

Rusia afirmó haber frustrado otra ofensiva ucraniana en el este de Donetsk y haber infligido grandes pérdidas. Kiev ha mantenido un estricto silencio sobre la contraofensiva, pero ha rechazado las afirmaciones de Rusia de que su Ejército ha frustrado los asaltos ucranianos.