¿Quién fue?

Nombre: Rebecca Anne Jones Fuentes Berain.

Nacimiento: 21 de mayo de 1957, Ciudad de México.

Fallecimiento: 22 de marzo de 2023.

De padre estadounidense y madre mexicana, su infancia la vivió en México, pero siendo adolescente empezó a radicar en E.U.

Estudios: Orange Coast College.

Ocupación: Actriz y productora de televisión, cine y teatro.

Premios: Ganó los premios TVyNovelas en 1986 y 1995 por su trabajo en El Ángel Caído e Imperio de Cristal, respectivamente.

Inicios

Rebecca Jones estudió Arte Dramático en el Orange Coast College, California. 

Más adelante se mudó a México, donde empezaría a dar sus primeros pasos en el mundo artístico.

Fue gracias a su tía política Fernanda Villeli -quien también fuera la escritora de la primera telenovela mexicana: La Senda Prohibida– pudo ingresar al Centro de Capacitación de Actores -ahora CEA- de Televisa , donde llamó la atención por su belleza y talento.

En el año de 1982 debutó en la pantalla chica con la telenovela El Amor Nunca Muere y al año siguiente participó en la exitosa telenovela El Maleficio.

Otros grandes proyectos televisivos donde participó fueron: El Ángel Caído, Cuna de Lobos, La Sonrisa del DiabloImperio de Cristal Para Volver a Amar.

Sus grandes amores

Jones fue una mujer de relaciones sólidas, pues durante toda su trayectoria artística sólo se le conocieron dos parejas.

El primero en entrar en su corazón fue Humberto ZuritaSe conocieron en la grabación de la telenovela Muchacha de Barrio de 1979, donde Rebecca interpretó a Becky , personaje que sólo duró un capítulo.

La actriz relata que su noviazgo inició fuera de los sets de grabación aunque compartieron pantalla en La Maldición.

Su romance finalizó cuando Rebecca atravesaba por un momento muy complicado de su vida por la muerte de su hermano, quien apenas tenía 22 años.

Tiempo después, Jones reveló que cuando fue a California a darle el último adiós a su hermano, ella y Alejandro Camacho ya estaban romanceando pero que su relación con Zurita no había terminado por completo. 

Por su parte, Camacho se encontraba en una relación con la actriz Alma Muriel.

Matrimonio con Camacho

Una vez terminadas las relaciones que ambos tenían, Rebecca fue la que dio el primer gran paso con Alejandro, pues ella le confesó que quería todo con él.

Afortunadamente el deseo fue mutuo y decidieron empezar una relación. Años más tarde se fueron a vivir juntos.

Esperaron cuatro años para casarse por el civil en la Ciudad de México. Su boda por la iglesia ocurrió en 1986, cuando la pareja visitó a la familia de Jones en Estados Unidos, aprovechando los seis días de descanso que les dieron cuando ambos filmaban Cuna de Lobos.

Su unión terminó en 2011, aunque nunca se supieron los motivos exactos, argumentaron que no fue un acontecimiento lo que detonó su ruptura, sino diferencias que surgieron a lo largo del tiempo y fue lo que les hizo caer en la conclusión de que ya no querían estar juntos.  

Maternidad

La histrionisa afrontó dos abortos espontáneos mientras estuvo casada con Camacho.

El primero ocurrió cuando tenía cinco meses de embarazo. La actriz aseguró que esperaba a una niña.

“En ese momento el doctor me dijo que había mil causas [para perderlo], pero terminó siendo por insuficiencia del cuello uterino”, contó Jones en una entrevista.

Su segunda pérdida fue tras haber dado a luz a Maximiliano, su único hijo. En esa ocasión su embarazo no era tan avanzado.

“Yo sí hubiera querido otro bebé porque perdí uno antes y perdí otro después de Max, pero dices ‘bueno, si Dios quiere que así sean las cosas, así son y ya'”,  concluyó.

Afirmó que el nacimiento de su primogénito fue de los minutos que cambiaron su vida.

Cáncer de ovario

En 2017 a la actriz de 65 años le detectaron por primera vez cáncer de ovario, tuvieron que practicarle una cirugía y varios tratamientos para erradicar el cáncer.

En ese momento le dijeron que le quedaba poco tiempo de vida, sin embargo ella hizo caso omiso y se enfocó en su tratamiento. Para el 2019 tras procedimientos y quimioterapia, la actriz venció la enfermedad.

Sin embargo en agosto del 2022, su ex esposo, Alejandro Camacho reveló en una entrevista que el cáncer había regresado al cuerpo de la actriz.

Camacho no quiso brindar detalles del proceso que estaba llevando a cabo su ex esposa para combatir nuevamente el cáncer.

Vida después del cáncer

Después de ser diagnosticada con cáncer de ovario a la actriz le surgió una oportunidad laboral en la pantalla chica con la telenovela Doña Flor y sus Dos Maridos (2019), donde dio vida a Margarita Canúl.

En el 2020, Jones participó en la aclamada serie de Manolo Caro La Casa de las Flores, donde encarnó a la manipuladora Victoria Aguirre, madre de Virgina de la Mora. 

A la actriz le gustaba encarnar a villanas que para ella era más divertido pues las ‘buenas’ tenían que llorar mucho y eso la cansaba.

En el 2022, Rebecca participó en la tercera temporada de ¿Quién Mató a Sara?también en la obra teatral Conejo Blanco, Conejo Rojo y en la telenovela Cabo.

También tenía varios proyectos en puerta para la pantalla grande.

Decae su salud

En noviembre Jones fue hospitalizada en un nosocomio de la Ciudad de México a causa de una infección pulmonaren redes sociales estaban solicitando donadores de sangre para la histrionisa.

Aunque fue cuidadosa y reservada con su salud, tan sólo este año ha tenido tres ingresos hospitalarios debido a que su estado físico ha decaído.

Al día siguiente de su hospitalización, su publirrelacionista Danna Vázquez reveló que la actriz había estado reaccionando muy bien, que era muy favorable la situación y que se encontraba ‘estable’.

Este miércoles 22 de marzo murió a los 65 años, informó su representante Danna Vázquez, a través de un comunicado.

“Con profunda tristeza queremos informar el fallecimiento de nuestra querida y admirada Rebecca Anne Jones Fuentes. “Rebecca estuvo acompañada en todo momento de sus seres queridos, se fue en paz y con profundo agradecimiento a su público para el que tanto trabajó toda su vida”.

Hasta el momento se desconoce la causa del fallecimiento. 

Descanse en paz