UNBOXING

Una consola única y especial como ROG Ally merecía más amor por parte de Asus, y es que a diferencia de Steam Deck, que en su empaquetado incluye un estuche para transportar la consola, la taiwanesa decidió que sería buena idea que este accesorio no se incluyera en la caja y se vendiera por separado. Mal.

En la caja encontramos a la unidad, su cargador, la documentación oficial como manual de uso rápido y la de regulaciones, en la tapa de la caja hay un stand de cartón bastante sencillo que sirve para levantar la consola.

A detalle: ROG Ally
  • Sistema Operativo: Windows 11 Home.
  • Procesador: AMD Ryzen Z1 Extreme, 8 núcleos, 16 hilos, cache total 24 MB y velocidad de reloj de hasta 5.10 Ghz.
  • GPU: AMD Radeon (AMD RDNA 3, 12 CUs, hasta 2.7 GHz, hasta 8.6 Teraflops).
  • Memoria RAM: 16 GB.
  • Almacenamiento: SSD M.2 PCIe 4.0 NVMe de 512 GB.
  • TDP: 9-30 W.
  • Pantalla: 7 pulgadas, resolución, FHD (1920 x 1080), relación 16:9, tasa de actualización de hasta 120 Hz y FreeSync Premium.
  • Puertos: 1 x 3.5 mm, 1 x Interfaz ROG XG Mobile con puerto USB Tipo C y 1x lector de tarjetas microSD UHS-II.
  • Conectividad: WiFi 6E y Bluetooth 5.2.
  • Batería: 40 WHrs.
  • Fuente de poder: Adaptador AC Tipo-C de 65 W.
  • Peso: 608 g.

LA EXPERIENCIA

La industria de las consolas portátiles vuelve a tener una explosión en 2023, después del último furor entre 2010 y 2012 cuando Sony y Nintendo consideraron buena idea llevar un gaming con mejores gráficos a cualquier lugar con PSP Vita y Wii U, respectivamente.

Con el avance de procesadores móviles de cómputo, inicia una nueva era para ejecutar juegos de complejidad gráfica en formatos compactos.

Steam Deck es el principal promotor de este fenómeno, detrás de la compañía estadounidense le siguen unas cuantas firmas chinas como GPD o Ayaneo.

Recientemente, se sumó la taiwanesa Asus, un tigre asiático con el capital e infraestructura para plantar cara a la consola de Valve con un equipo más poderoso llamado ROG Ally.

Antes de abordar el tema del rendimiento y experiencia de juego, es importante resaltar el diseño, ergonomía, pantalla y sonido.

El cuerpo es más compacto que Steam Deck y el agarre es más cómodo, en buena parte por la disposición de los botones, similar a un control de Xbox, incluso presenta la configuración ABXY.

Se nota la experiencia de Asus en el sistema de enfriamiento, puesto que la consola suma varias zonas perforadas en la parte trasera para recoger aire frío, en tanto, para liberar el calor, cuenta con dos rejillas en la parte superior.

No obstante, me sumaré a la queja de varios colegas reseñadores: la bahía del MicroSD está cercana a una rejilla superior, esto implica que la memoria externa esté expuesta a altas temperaturas, lo que reduce su vida útil.

De hecho, en la parte superior se encuentran todos los puertos y botones, como la entrada de 3.5 mm para audífonos, los botones de volumen, el interruptor de apagado y el enchufe especial XG Mobile Interface para conectar un módulo ROG XG Mobile, es decir una tarjeta gráfica como la Nvidia GeForce RTX 4090. Lo malo es que este componente no se vende en México.

La pantalla y el audio son una delicia. El panel es de 7 pulgadas, resolución FHD (1,920 x 1,080), relación de aspecto 16:9 y es táctil. Sobre el sonido, y aquí incluimos los micrófonos, quedamos satisfechos.

Para ser muy compacta, ROG Ally entrega una calidad sonora de 10, mientras que en la comunicación mediante sus micrófonos ofrece un sistema de cancelación de ruido por software que deja pasar solo la voz del usuario y apartar el ruido exterior.

Un producto especializado y de nicho, así es como definiremos a este híbrido que entenderán mejor los más geeks y apasionados por el cómputo, quienes no tienen miedo de meterse a picarle y moverle todas las opciones disponibles.

Será un problema para los que buscan una experiencia de juego instantánea, como ocurre en Nintendo Switch, e incluso Steam Deck, que, con solo unos clics, te pone en el terreno de juego.

A diferencia de Steam Deck, que basa su sistema operativo Steam OS en Linux, ROG Ally recurre a Windows 11 para llevar a cabo todas las tareas, o mejor dicho, todo el gaming.

Esto supone un problema y una ventaja, porque deja toda la responsabilidad al jugador de establecer sus configuraciones; en nuestro caso pasamos muchas horas actualizando Windows, luego poniendo a punto las actualizaciones de los drivers y software de Ally.

La ventaja es que al contar con Windows 11, puedes hacer más cosas que jugar, como ejecutar otras aplicaciones de ofimática y navegar por Chrome, revisar documentos PDFs y más.

¿Puede correr todos los títulos triple A? Sí, pero con algunas condiciones, pues se requiere sacrificar calidad visual y recortar el número de cuadros por segundo (cps), esto es por las limitaciones del hardware. Para intentar resolver el problema, Asus incluye la herramienta Armory Crate SE, un centro de control para editar varias funciones de la consola.

La más importante es la modulación de la potencia energética que requiere el procesador para ejecutar los juegos. A mayor consumo energético, mejor es la experiencia de gráficos y cps.

Para los títulos triple A es imperativo acomodar el rendimiento en turbo, que recurre a 25 Watts de demanda eléctrica constante.

A la ecuación energética hay que sumarle que la capacidad de la batería es de 40 Watt Hora. Establecimos la potencia máxima en juegos demandantes como Control, God of War y Call of Duty: Warzone, la batería duró entre 50 minutos y una hora, en una resolución de 1080p.

Podemos concluir que no es tan portable como promete.


Como colofón a esta breve reseña, vale la pena resaltar que las arquitecturas ARM, presentes en celulares y en dispositivos Apple, ahora cobran más sentido.

Se viene un futuro con un gaming más demandante, de ahí que AMD e Intel tienen que apurarse para resolver el tema de eficiencia energética que derrumba a ROG Ally.

¡LO MEJOR!

ROG Ally es una máquina poderosa con Windows 11 que además de poder jugar títulos triple A, te permite hacer de todo como si fuera tu PC de uso diario. La versatilidad que tiene esta unidad con varias plataformas gamer es como un menú para degustarse con paciencia y deglutir cada elemento personalizable a tu alcance.

LO MENOS COOL...

Manipular Windows 11 desde una pantalla de 7 pulgadas es muy complicado, me gustaría que Asus y Microsoft trabajen en una interfaz más sencilla. La batería se drena en minutos con títulos pesados, lo que te obliga varias visitas al cargador. Otro punto de mejora es el acomodo del puerto MicroSD para prolongar la vida de las memorias.

CONCLUSIÓN

¿ROG Ally o una laptop gamer? Si no tienes problema en jugar títulos tan bellos como Horizon Zero Dawn a una resolución de 720p, ve por ella y de paso tendrás una máquina de trabajo. Si buscas una experiencia 100 por ciento portátil, te sugerimos esperar a una edición con mayor eficiencia energética o bien invertir un par de pesos más en una laptop gamer.

Asus ROG Ally AMD Z1 Extreme

$17,000 en Asus México
Calificación: 3 estrellas de 5 ⭐⭐⭐