Su actividad en la política la inició en 2012 al ser electo Presidente Municipal de Soledad de Graciano Sánchez, conurbado con la capital potosina, postulado por el PRD. Su papá, Ricardo Gallardo Juárez, ocupó ese mismo cargo en el periodo de 2009 al 2012.

Durante las campañas de 2012 fue exhibido en redes sociales portando un arma AR-15 al lado del entonces director de Seguridad Pública Municipal, Jesús Maldonado Zamarrón.

En los comicios de 2015  intentó ser candidato del PRD a la Gubernatura de San Luis Potosí en alianza con el PT y MC pero fue detenido por la entonces PGR y encarcelado en un penal de alta seguridad.

Las autoridades lo acusaron de delincuencia organizada y lavado de dinero al supuestamente triangular en su beneficio más de 209 millones de pesos de las arcas del Municipio de Soledad de Graciano Sánchez cuando era Alcalde.

Al no demostrarle los delitos, el 8 de diciembre del mismo año quedó en libertad.

En 2018 compitió como candidato del PRD a una diputación federal, la cual ganó; el partido lo designó como su coordinador de bancada.

Sin embargo, en febrero de 2019 renunció a ese partido y a su grupo parlamentario para poder votar libremente a favor de iniciativas impulsadas por Morena.

Aunque se mantuvo durante varios meses como diputado sin instituto político, en agosto de ese mismo año se integró a la fracción del PVEM.

En enero pasado, el diario digital Astrolabio publicó que los Gallardo pasaron de ser dueños de una empresa distribuidora de pollo con adeudos millonarios a convertirse en dueños de un imperio inmobiliario de 3 millones de metros cuadrados con valor de más de 100 millones de pesos.