Pato Pekín

El Pato Pekín, con su piel crujiente y su carne jugosa, es uno de los platos más famosos y apreciados de la cocina china. Su origen se remonta a siglos atrás, a la vibrante ciudad de Pekín, donde se gestó esta delicia culinaria que ha conquistado paladares en todo el mundo.

Origen

El Pato Pekín, una delicia culinaria de la cocina china que ha resistido la prueba del tiempo, continúa deleitando los paladares de comensales de todo el mundo. 

Se dice que el arte de preparar el Pato Pekín se remonta al siglo 18, durante la dinastía Yuan. Fue entonces cuando la corte imperial introdujo la técnica de asar el pato en un horno de leña, dando lugar a su característica piel crujiente y jugosa carne. Hu Sihui, inspector encargado de las cocinas imperiales chinas, dejó por escrito la receta en su libro “Recetas Completas de Platos y Bebidas” en el año 1330, consolidando así el Pato Pekín como un manjar imperial. 

A lo largo de los siglos, se ha convertido en un símbolo de la cultura culinaria china, admirado por artistas, estudiosos y dignatarios por igual. Durante la dinastía Ming, el plato se popularizó entre la corte imperial y, más tarde, entre la aristocracia china durante la dinastía Qing. 

Aunque su origen exacto sigue siendo objeto de debate, algunos creen que los chinos ya disfrutaban de versiones tempranas de pato asado desde el siglo 5. Sin embargo, fue la refinada técnica de la dinastía Yuan la que elevó al Pato Pekín a su estatus icónico. 

La fama del Pato Pekín trascendió fronteras y fue un factor en la diplomacia culinaria, como lo evidencia el elogio del exsecretario de Estado de los Estados Unidos, Henry Kissinger, quien se dice que alabó el plato durante su visita a China. Esta delicia gastronómica se ha convertido en un embajador cultural que une a personas de diferentes orígenes en torno a la mesa.

Ingredientes

Para el pato:

1 pato de mil 700 kg
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1 taza de agua caliente
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2 tazas de agua helada
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12 tazas de agua hirviendo
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1 pepino despepitado y cortado en tiras finas
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2 cucharadas de salsa Hoisin
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1 cucharada de miel
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12 cebolletas con cortes paralelos finos hasta la mitad
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Para tortitas mandarín:

2 1/2 tazas de harina de trigo
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2 cucharaditas de azúcar
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1 cucharada de aceite de sésamo
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1 taza de agua hirviendo
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Preparación

4 PORCIONES

120 MINUTOS

MEDIO

PATO

  1. Lava el pato, quitar el pescuezo y extraer del interior del cuerpo los trozos grandes de grasa. Sujetar el ave sobre el fregadero y, con mucho cuidado y muy lentamente, girar mientras lava la piel con agua hirviendo. Colocar el pato en una rejilla sobre una bandeja de horno.
  2. Mezclar la miel con el agua caliente y glasear dos veces el pato. Dejar escurrir durante cuatro horas en un sitio fresco y aireado. Meter las cebolletas en agua helada para que se abran en forma de pincel.
  3. Precalentar el horno a 210 grados centígrados. Asar el pato en la rejilla sobre la bandeja del horno durante 30 minutos. Voltear con cuidado para no desgarrar la piel y asar durante otros 30 minutos. Sacar y dejar en reposo dos minutos, trasladar a un plato caliente.
 
TORTITAS MANDARÍN
  1. Poner la harina y el azúcar en un cuenco mediano y verter el agua hirviendo. Remover varias veces y dejar entibiar. Verter la mezcla sobre una superficie ligeramente enharinada y amasar. Cubrir y dejar en reposo durante 30 minutos.
  2. Tomar dos cucharadas rasas de masa, hacer bolas y aplastar con rodillo en forma de círculos de 8 centímetros de diámetro aproximadamente. Untar una cara ligeramente con el aceite de sésamo y poner otro encima. Volver a aplastarlos para formar una torta delgada de 15 centímetros de diámetro. Repetir la operación hasta obtener más o menos 10 piezas dobles.
  3. Calentar un sartén y poner en él las tortitas de una en una. Dar la vuelta cuando aparezcan pequeñas burbujas en la superficie y presionar con un paño de cocina limpio. Cuando se inflen, pasar a un plato. Una vez frías separar las mitades. Apilar y cubrir para que no se sequen.
 
MONTAJE
  1. Para servir, cortar el pato en rodajas finas. 
  2. Colocar las tortitas, el pato, el pepino y la cebolleta en diferentes posiciones.
  3. Vaciar la salsa Hoisin en un plato pequeño. Cada comensal se sirve una tortita con la parte sin cocer hacia arriba; untar un poco de salsa, poner encima dos trozos de pepino, otro de cebolleta y una rodaja de pato.
  4. Para degustar se dobla la tortita en forma de sobre con los extremos boca abajo.

Información y Diseño: Janayna Mendoza
Receta:
 Grupo REFORMA

Fuentes: China.org y National Geographic   
Fotos: Canva
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