Shahpary Pulido hizo glamping en el desierto de piedras de Agafay, ubicado aproximadamente a 30 kilómetros de Marrakech, donde paseó en camello, en cuatrimotos y cenó a la luz de las velas el tradicional platillo marroquí llamado ‘tajine’.

Con un linaje materno que asciende del antiguo Irán, Shahpary Pulido evocó sus raíces persas al visitar por primera vez una de las naciones africanas que, como el Imperio Persa, se desarrolló bajo la influencia árabe: Marruecos.

“Tenía mi ojo en ese país desde hace muchos años, porque me encanta esa cultura y el Medio Oriente; Marruecos está en África, pero de todos modos tiene el misticismo de esa región”, comentó la empresaria de 34 años, Shahpary Pulido.

Durante ocho días y de la mano de su marido, Jorge López Campos, la propietaria de la marca de sombreros Palo de Yucca, Shahpary Pulido aprovechó al máximo su estadía, la cual tuvo varias paradas locales con el objetivo de sumergirse en las características históricas y actuales de esta sociedad.

“Nos centramos en Marrakech, pues soy de la idea de que para conocer bien un lugar tienes que pasar varios días en éste, no me gusta saltar de ciudad en ciudad”, explicó la madre de Alía y Rania, Shahpary Pulido.

Shahpary Pulido se hospedó en La Mamounia, hotel diseñado por los arquitectos franceses Henri Prost y Antoine Marchisio, quienes mezclaron la arquitectura marroquí con la corriente art déco. Éste abrió sus puertas en 1922.

Un día completo lo ocupó para hacer un tour a ocho monumentos: la Mezquita Koutoubia, la Puerta Bab Agnaou, las Tumbas Saadíes, el Palacio de la Bahía, el Mellah o antiguo barrio judío, el Palacio El Badi, la Medersa Ben Youssef y la Plaza Jemaa el Fna.

Durante otra jornada, Shahpary Pulido se adentró a la Medina de dicha urbe imperial, para caminar por sus famosos y peculiares mercados de estilo medieval que venden cerámicas, joyas, especias y telas.

“Es un barrio amurallado, no pueden entrar muchos coches, entonces casi todo es a pie y adentro están los zocos, que son mercados locales conformados por más de 400 tiendas, con laberintos muy grandes y confusos, te puedes perder”, detalló Shahpary Pulido.

Como fanática del melodrama estadounidense “Sex and the City”, Shahpary Pulido se hospedó tres noches en La Mamounia, considerado por diversas publicaciones internacionales como uno de los mejores hoteles del mundo.

Luego de que cerró sus puertas después de la Segunda Guerra Mundial y se mantuvo así durante 60 años, el palacio fue restaurado y reinaugurado en 2017 con el nombre de Museo de Confluencias Culturales, considerado un paraíso para los amantes del café.

Me sentí, literalmente, en la película de Aladino, era lo que yo esperaba por todo lo que había visto y escuchado de amigos. Marrakech es una ciudad mística con un mercado único, muy peculiar a los de otros países, diferente a los de Turquía o la India”.

Shahpary disfrutó del spa del hotel La Mamounia, donde se realizó un masaje y el ritual del hammam, también conocido como baño turco.

“Ha salido en películas y series, desde hace mucho tiempo quería conocerlo, parece un palacio muy bonito, tiene mosaicos en todas partes y un spa que es famoso mundialmente”, dijo la empresaria de sangre iraní, Shahpary Pulido.

También se alojó en el hotel Ryad Dyor, culto al lujo y a la belleza arquitectónica marroquí; asimismo, fue cautivada por la majestuosidad natural del desierto de Agafay, en donde hizo glamping.

“Fue una experiencia inmersiva a la cultura, lo que yo quería experimentar, cómo vivían los bereberes, hicimos un paseo en camellos al atardecer, llegamos a cenar a la luz de las velas y después a dormir”, explicó Shahpary Pulido.

La hija de la angloiraní y filósofa Shahrzad Dowlatshahi regresó a México no sólo con una experiencia cultural más, también con ideas creativas y contactos para evolucionar su marca de prendas femeninas, ahora con tejidos marroquíes.

+ Entre el Occidente y el Medio Oriente

Si bien no hay una ley o código de vestimenta en Marruecos, la empresaria de 34 años, Shahpary Pulido, mostró respeto por esta cultura, sin perder el estilo que la caracteriza:

  1. Para salir a turistear por la Medina usó vestidos claros y coloridos, de telas frescas, que taparon sus piernas, hombros y brazos.
  2. Por momentos, cubría su cuello y hombros con una pashmina cuando el vestido era de tirantes.
  3. Dentro del hotel usó vestidos cortos de su propia marca, con mangas globo, los cuales portó con diferentes colores de sandalias sin tacón.
  4. Debido al polvo en los exteriores, así como los desniveles de las calles y edificios, portó unos cómodos tenis blancos que combinaron con todos sus outfits.

Una buena inversión son los viajes, conocer el mundo, porque cuando nos vamos de esta vida lo único que nos llevamos son las memorias, qué mejor que sean en lugares mágicos e históricos, llenos de cultura y arte”.

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De acuerdo al clima, la mejor temporada para visitar Marruecos es en primavera u otoño, pues la temperatura es templada, mientras que en verano hace mucho calor para recorrer el desierto y, en invierno, la mínima es de 7 grados centígrados y es temporada de lluvias.

Al igual que lo hicieron Charles Chaplin, Franklin D. Roosevelt y Winston Churchill, probó el Bacha Coffee, creado en 1910 dentro del Palacio Dar el Bacha y que actualmente reúne las mejores cosechas de 30 países productores de grano arábica.

Una de las cosas que más la impactaron de toda su travesía fueron los zocos, que son los tradicionales y mundialmente famosos mercados dentro de la Medina de Marrakech.

La esposa de Jorge López Campos cenó en el restaurante La Grande Table Marocaine del Royal Mansour, hotel diseñado por el Rey Mohammed VI y considerado uno de los más lujosos del mundo.

+ Toma nota

Si también quieres adentrarte al corazón de Marrakech, éstas son las recomendaciones de Shahpary Pulido:

  1. Asesórate de plataformas digitales para contratar a un buen guía que se adapte a tus necesidades, por ejemplo, un recorrido de cuatro horas por los zocos.
  2. Haz un tour durante un día completo con guía y chofer a los ocho lugares más emblemáticos: Mezquita Koutoubia, Puerta Bab Agnaou, Tumbas Saadíes, Palacio Bahía, el Mellah, Palacio El Badi, Medersa Ben Youssef y Plaza Jemaa el Fna.
  3. Cena en el restaurante Dar Yacout dentro de la Medina para vivir una experiencia inolvidable y otra noche en La Grande Table Marocaine, dentro del hotel Royal Mansour.
  4. Conoce el desierto de Agafay, que queda a 45 minutos del centro; si es posible, pasa una noche en éste, sugiero el Scarabeo Camp.
  5. Vuela en globo aerostático al amanecer para observar la Cordillera del Atlas.

El Palacio de la Bahía tiene ocho hectáras de extensión y está integrado por 150 habitaciones que dan a diversos patios y jardines.

Con la ayuda de dos niños, la madre de Rania y Alía logró salir de los zocos, pues se perdió debido a que éstos parecen laberinto

Dentro de la Medina, cerca de la Mezquita Koutoubia, en el restaurante Dar Yacout, Shahpary disfrutó de una cena con música tradicional en vivo creada por el guembri o guitarra marroquí y qarkabas o castañuelas marroquíes de hierro.

Shahpary Pulido, joven de ascendencia iraní, evocó el estilo de vida de los bereberes, quienes son los aldeanos que viven en el norte de Marruecos, entre el desierto de Agafay y la Cordillera del Atlas.