Desde que Silvia Cherem conoció a don Lorenzo Servitje (q.e.p.d) en 1997, el empresario le expresó su deseo por no tener una biografía, así que la escritora se dedicó a tomar notas de todo lo que él compartía en la mesa de su casa, por más de una década.
De esta manera, Silvia Cherem entendió que lo que él hacía debía inspirar a jóvenes de México y, el resultado fue la primera versión de “Al Grano”, en 2008, libro que, asegura, disfrutó en vida.
“Él aceptó que estuvieran plasmadas las luces y sombras de su personalidad; decía que yo era ‘la testigo de su vida’”, platicó Silvia Cherem, la autora del libro “Al Grano”, “tenía capítulos de varios de los fundadores, porque se sentía en deuda con quienes trabajaron a lomo partido a su lado”.
“Siempre entendí que él era el faro, líder y que debía de ser el foco de una publicación, pero no se dejó; tuvieron que pasar varias décadas hasta que, por insistencia de la casa editorial, hace un par de años lo reescribí y actualicé para servir a la mirada de las nuevas generaciones y me encantó lo que surgió”.
El libro recoge su pensamiento, frases, anécdotas y datos personales. Era un hombre que no tenía miedo de soñar imposibles, decía que estos se alcanzan cuando hay voluntad de trabajo, visión, metas precisas y bien calculadas, capacidad de asumir riesgos cuando se tiene fe y una buena dosis de buena suerte”.
DISTINGUEN LA LABOR DE SILVIA CHEREM
Fue una presentación verdaderamente maravillosa, muy interesante y, sobre todo, conocer la cercanía que tuvo Silvia Cherem con el señor Servitje”.
La pluma de Silvia Cherem
+ La nueva versión del libro ‘Al Grano’ consta de 336 páginas.
+ El prólogo es de Daniel Servitje, hijo de don Lorenzo Servitje (q.e.p.d.).
+ En el panel, moderado por Bárbara Anderson, participaron Alfredo Achar, Luis Téllez, Antonio Del Valle, Daniel Servitje, José Medina Mora, Roberto Banchik y Silvia Cherem.
Para la presentación de la segunda versión del libro “Al Grano”, reunieron a amigos y seres queridos de Silvia Cherem y don Lorenzo Servitje, quienes escucharon pensamientos, y conclusiones sobre su existencia.
“Me gustó mucho el final del discurso de Silvia, que con su entusiasmo de siempre, abogó por la paz en el mundo, y contagia lo que
expresa a quienes se dirige; también, fue lindo escuchar anécdotas de Toño del Valle y Daniel Servitje sobre un hombre tan privado y discreto, como fue Lorenzo”, contó Claudia Marcucetti, miembro del Patronato de la Fundación Niños en Alegría, A.C.
De Silvia, me encanta su manera de ponerse en juego, su perseverancia y determinación por luchar en lo que cree justo; a nivel literario, me gusta su forma de tocar las fibras más sensibles del ser humano”.
Algo especial del libro “Al Grano” es el prólogo, realizado por Daniel Servitje, hijo menor del hombre de negocios, quien compartió vivencias personales con su padre desde el aspecto personal y profesional.
“Tuvimos siempre una relación muy cercana, podríamos comentar sobre temas políticos, familiares, de la empresa; nunca nos tratamos como jefe y empleado y eso me sirvió muchísimo”, compartió Daniel Servitje.