¿De qué va?

Starfield es un role-playing game (RPG), juego de rol, para un solo jugador del tipo aventura espacial creado por la empresa estadounidense Bethesda, desarrolladora también de otras famosas franquicias del gaming como Fallout 4 y The Elder Scrolls.

Los entendidos saben que estos juegos son unas joyas del RPG, que sumergen al jugador en la historia gracias a su ambientación bien lograda, personajes interesantes, tramas atractivas y la personalización. Se podría decir que es el sello Bethesda.

Justo por eso, cuando Todd Howard, director ejecutivo de Bethesda, anunció Starfield en 2018 durante la extinta E3, la expectación fue alta. Howard afirmó que Starfield era un título que llevaban pensando y trabajando por años, al menos 25, como se reveló después en un gameplay publicado por la compañía.

En el video del gameplay, lanzado hace dos meses, tuvimos una probada del título, que volvió a poner las expectativas por los aires, pues se reveló que podríamos visitar planetas, pilotar naves espaciales y conocer montón de contenido. Bueno, hoy Starfield salió a la venta y no, no cumplió lo prometido, entregando una experiencia de exploración espacial incompleta. Eso sí, no podríamos decir que es un mal juego, de hecho, es bastante bueno. Veamos.

Primeras impresiones

La trama se va desarrollando conforme avanzas en el juego, pero en síntesis, se sitúa en el año 2330, 20 años después de Colony War, una guerra que enfrentó a dos poderosas facciones humanas, United Colonies y la Freestar Collective. En el tiempo en que se desarrolla Starfield, la humanidad viaja a voluntad a través del cosmos, luego de verse obligada a abandonar la Tierra por la desaparición de la magnetósfera, componente que hacía sostenible la vida.

La historia comienza en una mina, donde te encuentras trabajando. En cierto punto hallas una especie de piedra que al tocarla genera unas imágenes lisérgicas, parecida a las vistas en 2001: Odisea en el Espacio de Stanley Kubrick. Debido a ello, tu personaje se desmaya.

Al despertar, deberás crear un personaje y elegir su historia de fondo, la cual vendrá acompañada con habilidades y rasgos específicos, así como tres modificadores. Es posible elegir con qué pronombre te identificas, él, ella o elle, punto que causó polémica entre algunos jugadores.

Gracias a tu descubrimiento, la organización Constelación se fija en ti, lo que te da acceso a una nave, momento en que será posible salir del planeta y comenzar la aventura.

Aunque hay multitud de planetas a tus pies, para avanzar en la historia deberás ir adonde el juego te lleve, explorar los sitios en los que te encuentres y completar los objetivos que se presenten, pero no queremos entrar en detalles para evitar spoilers.

Starfield cumple (a medias) al crear una experiencia de rol espacial que nos permite ir obteniendo experiencia conforme completemos la trama y misiones secundarias. También conseguiremos experiencia y recursos al lootear enemigos abatidos, vencer criaturas y extraer materiales como la plata, que se encuentra desperdigada en distintos planetas. Todo esto con el fin de mejorar nuestras armas, vestimentas y nuestra nave para ser el mejor explorador de la galaxia.

Bethesda generó inmensas expectativas sobre Starfield, al punto que la comunidad creyó que tendría en sus manos a Star Citizen, videojuego de simulación espacial en desarrollo muy ambicioso, pero no. Tenemos el espacio a nuestro alcance, más de mil planetas, pero no en todos habrá mucho qué ver.

El mismo Howard explicó que solo el 10 por ciento tendrá vida y que la mayoría de los planetas será generado de forma procedural, o sea, mediante generación aleatoria de contenido para exploración, como ocurre en la saga Horizon. Entonces, el 90 por ciento de los mundos está árido, sin mucho por conocer.

El directivo explicó que esto es adrede para hacer sentir pequeño al jugador ante la profundidad del universo. ¿La idea no era la exploración entonces? Sí, y Howard afirmó que esto abona a ello, declaración que desmentimos.

Para empezar, el viaje espacial es limitado. Solo puedes orbitar los planetas, entrar en ellos y salir desde el menú. Por más que te acerques al planeta, jamás ingresarás a su atmósfera. Tampoco es posible viajar entre planetas usando la nave, todo es mediante transiciones cinemáticas. Vaya fraude.

Teóricamente, es posible llegar a otro mundo navegando, pero te llevará más de 7 horas, como comprobó Alanah Pearce, periodista de videojuegos. No puedes usar la nave dentro del planeta y para llegar a los sitios de interés no hay vehículos, así que deberás caminar todo el tiempo, o correr, pero restará resistencia. Bienvenidos al simulador de caminar.

El juego te marca desde el menú si un planeta tiene algo que podría ser interesante. Consideramos que los planetas que no posean lugares interesantes señalados sean descartados, porque si son generados cuando se acerca el jugador, encontraremos en ellos características similares, nada original.

El combate, tanto espacial como en tierra, es un aspecto flojo. Los NPC son torpes, no representan un reto ni aunque estés a dos metros de distancia de ellos. En el espacio, hay ausencia de parry, o sea, contraataques o algún añadido extra, solo te limitas a esquivar y a perseguir, además, el apuntado tampoco es desafiante.

No obstante, debo reconocer que las primeras criaturas que encontré me generaron repelús. Están bien diseñadas y te hacen sentir una experiencia planetaria tipo Rick y Morty, expuesto a criaturas desconocidas que podrían matarte.

En general, los gráficos son buenos. Jugué Starfield en Xbox Series X y no tuve ningún inconveniente. Los interiores de la nave están bien logrados, cada detalle luce nítido, brillante, con contraste. Hay planetas que se ven maravillosos, lleno de colores o quizás coloreados de rojo, pero se dejan admirar.

La ciudad principal de Starfield, en cambio, un escenario que se visita mucho, adolece de unos árboles que se ven poco realistas con unas texturas plásticas nada estéticas; cuando miras al horizonte, en ocasiones este se ve blancuzco, como si hubiera neblina.

En los planetas que sí tienen vida, la flora, la fauna y el ambiente es fantástico. Dan muchas ganas de recorrerlo y dejarte maravillar por lo que tiene por ofrecer.

Conclusión

Luego de ver algunos puntos buenos y malos, ¿debería comprar Starfield? Dejémoslo así, si eres un fan de los RPG o Bethesda, tendrás un buen juego que se disfruta por la historia, trama y personalización. 

En tanto, si eres de los que esperaba una revolución, con una exploración espacial, viajes interestelares y cientos y cientos de planetas llenos de vida y ejércitos por arrasar, este no es tu juego.

Si obvias sus fallas y dejas pensar en lo que Starfield pudo haber sido, lo vas a disfrutar bastante.

Starfield

Juego disponible para Xbox Series X|S y PC.
M, para adolescentes mayores de 17 años.
Desarrollador: Bethesda Game Studios .
Distribuidor: Bethesda Softworks .
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