Cumplen su sueño
Durante sus dos años de noviazgo, Susana Viramontes y Luis Monroy se dedicaron a conocerse, complementarse y reconocer los valores que comparten, por lo que el día de su boda llegaron al altar seguros y felices de dar ese gran paso.
Tras un tiempo de vivir juntos, la pareja desarrolló una gran conexión, misma que los hizo coincidir en los detalles para su enlace, pues ambos querían un evento fuera de lo común y a la orilla del mar, por lo que eligieron Tulum para su gran día.
“Fue algo muy especial, nunca me sentí nerviosa, estaba feliz porque estaban nuestras personas más cercanas, ya que hicimos un buen filtro en las invitaciones y valoré festejar con cada una de ellas”, dijo la licenciada en Negocios Internacionales por la Universidad del Valle de México.
“Quien nos ayudó muchísimo a conseguir el espacio y organizar gran parte del evento fue mi cuñada, Edna Monroy, pues nosotros vivimos en la Ciudad de México y ella allá, así que nos coordinábamos a distancia, estamos muy agradecidos por tanto apoyo para que esto se hiciera realidad, de hecho, por eso ella fue uno de nuestros testigos”.
Rodeados de paisajes paradisiacos, los originarios de Sonora y Coahuila se dieron el “sí, acepto” en una ceremonia civil, para después disfrutar de una recepción, en la que sorprendieron a los presentes con un menú muy a su estilo, pues mezclaron la gastronomía de sus estados.
“Como no queríamos lo típico de platillos servidos a cada comensal, ofrecimos un banquete en el que, de entrada, hubo sushi, luego carne asada de donde yo vengo y, más adelante de la fiesta, dimos gorditas de chicharrón, clásicas del lugar de origen de Luis, lo que encantó a todos”, comentó la novia.
“Mi vestido fue un regalo de alguien muy importante para mí, luego lo llevé a que lo modificara un poco una experta y mi mamá, Guadalupe Serna, añadió los toques finales como las plumas y las aplicaciones en la cauda, fue algo muy especial y me encantó el resultado”, Susana Viramontes.
Uno de los momentos más románticos de la reunión fue el primer baile como esposos, para el que eligieron el tema “Make You Feel My Love”, de Adele, y, posteriormente, llamaron a la pista a los papás para bailar al ritmo de la canción “Por ti Volaré”, de Andrea Bocelli.
“El apoyo de nuestros padres ha sido muy bonito; un fin de semana antes de irnos a Tulum, los juntamos en la Ciudad de México y convivimos juntos todo un fin de semana, ocasión en la que intercambiaron mensajes muy bonitos hacia nosotros, de hecho, fue el día que se conocieron en persona”, confesó el novio.
La familia es uno de los principales pilares para los dos, ya que tanto el licenciado en Derecho por la Universidad Iberoamericana como su esposa, coinciden en que sus papás y hermanos son parte fundamental en su vida y crecimiento, lo cual los hizo unirse todavía más durante su relación.
“Además de eso, compertimos otras cosas como el deporte. Nos tocó vivir toda la pandemia juntos y me encanta lo comprometida que es, somos muy afines a querer mucho y estar muy pegados; me fascina lo trabajadora, inteligente y bonita que es”, añadió el también servidor público del Gobierno Federal.
Una vez casados, el matrimonio gozó de unos días al lado a los suyos en el destino, para después regresar a la Ciudad, sin embargo, su plan a futuro es mudarse por una temporada al destino caribeño.
Información: Mariana Muñoz Z.
Imágenes: Cortesía Susana Viramontes y @photodanielgastaldi
Edición: Adriana Ramírez Bustamante