A veces, el periodo posterior a las nominaciones a los premios Óscar puede parecer un letargo. Quizá se hable de los desaires de las películas que fueron o no consideradas, pero las cosas acaban calmándose conforme se acerca la ceremonia.
Pero la edición 2025 no ha sido así. Las dos últimas semanas en particular han sido de las más tumultuosas que se recuerdan, gracias en gran parte a la polémica suscitada por los antiguos tuits de una de las protagonistas de Emilia Pérez, Karla Sofía Gascón.
La actriz, en un principio desafiante, se rebeló para defenderse, manteniendo su escándalo en los titulares durante varios periodos cruciales de votación. Ahora, una cinta que lideraba la carrera con 13 nominaciones se ha visto perjudicada. ¿Cómo están sus competidoras a Mejor Película en lo que va de la temporada de premios?
Se fortalece: Anora
Al comenzar el año, las aspiraciones del filme ganador de la Palma de Oro de Cannes 2024 en la temporada de premios parecían estancarse. La comedia dirigida por Sean Baker se quedó sin premio en los Globos de Oro el 5 de enero, y esa sensación de fracaso perduró durante las semanas siguientes, cuando los Critics Choice Awards se pospusieron del 12 de enero al 7 de febrero debido a los incendios forestales de Los Ángeles.
A pesar de eso, en los Critics recogió el premio a la Mejor Película y la noche siguiente obtuvo los máximos galardones en las premiaciones de los Sindicatos de Directores de Hollywood (DGA, por sus siglas en inglés) y el de productores (PGA).
Cualquier película que triunfe en ambos gremios debe ser considerada la favorita al máximo galardón de la Academia, aunque hay un caso aislado en el que 1917 triunfó en los premios de la PGA y la DGA y, aun así, perdió el Óscar contra Parásitos.
En terreno inestable: Emilia Pérez
Puede que haya caído debido al escándalo, pero ¿puede darse por totalmente descartada? En los Critics Choice Awards se tiene una lectura contradictoria: a pesar de haber tenido tres victorias, incluida a la actriz secundaria Zoe Saldaña, la votación de esa ceremonia se cerró semanas antes de que los tuits de Gascón salieran a la luz.
En los premios PGA, donde la votación finalizó justo cuando se desató la polémica sobre la actriz española, y en los premios DGA, donde la votación se cerró dos días después de que el director de la película, Jacques Audiard, se desligara de su protagonista, se fue a casa con las manos vacías.
Arrasó en los Premios del Cine Europeo de diciembre, en los que ganó todas las categorías a las que estaba nominada (incluida Mejor Actriz).
Aspira a ser ¡la número dos! Cónclave
Para que una película sea considerada una de las favoritas al máximo galardón del Óscar, normalmente necesita también una nominación a la Mejor Dirección, algo que no tienen ni el thriller ni el musical.
La estrategia para la cinta dirigida por Edward Berger, que cuenta con la votación preferencial única utilizada por los Óscar, consiste en conseguir un buen resultado, siendo la película número dos de todo el mundo.
Una película que acumule suficientes puntos de los votos del segundo puesto podría muy bien imponerse a otra que ocupe el primer puesto en algunas votaciones, pero el último en otras. En una temporada repleta de controversia, puede que esa simpatía sea suficiente.
Respaldo taquillero: Wicked
El filme protagonizado por Ariana Grande y Cynthia Erivo tiene un camino aún más difícil, ya que carece de menciones a Mejor Director y Guion, y ninguna película desde Grand Hotel, de 1932, se ha llevado el trofeo a la Mejor Película sin esas nominaciones clave. Aun así, votantes que piensan apoyar la cinta de Jon M. Chu lo harán porque el éxito de este tipo de espectáculo es bueno tanto para Hollywood como para los Óscar. Un entusiasmo que Duna: Parte Dos no ha logrado reunir, a pesar de que ambas tuvieron un buen desempeño en la taquilla.
El musical se alzó como la quinta cinta más taquillera de 2024, con más de 723 millones de dólares; detrás de ella se encuentra la protagonizada por Timothée Chalamet, con más de 714 millones.
Con las manos vacías: El Brutalista
Durante los galardones del gremio de realizadores, Brady Corbet era uno de los favoritos a llevarse el mayor galardón de la noche por su épico drama de época, que le costó menos de 10 millones de dólares.
Corbet se había llevado el Globo de Oro a Mejor Director y, en una época en la que los Óscar a la película y director suelen ir a parar a dos cintas distintas, parecía tener muchas posibilidades de llevarse al menos uno de esos premios.
Sin embargo, el ganador fue su colega Sean Baker (Anora), quien parecía totalmente sorprendido cuando se anunció que él y no Corbet fue el ganador del DGA.
Lo cierto es que las opiniones del filme de 3 horas y 35 minutos puede ser polarizante; en Metacritic tiene una calificación de 90/100 de críticos, pero de 6.5/10 de usuarios.
Alternativa brasileña: Aún Estoy Aquí
¿Vuelve a estar en juego el Oscar al cine internacional? Hace sólo unas semanas, habría sido una locura apostar en contra de Emilia Pérez en esa categoría, ya que el premio casi siempre va a parar a la película con la Mejor Fotografía. Pero con esa película de Jacques Audiard contra las cuerdas, podríamos tener una verdadera carrera entre manos.
Es cierto que la película dirigida por Walter Salles, sobre una activista cuyo marido disidente es desaparecido por la dictadura militar brasileña, se enfrenta a una dura batalla en las categorías de película y mejor actriz; Demi Moore (La Sustancia) sigue siendo la favorita en la categoría de interpretación.
Sin embargo, al ser la única otra gran aspirante en la categoría de cine internacional, tiene posibilidades de convencer a los votantes que prefieran una alternativa de buen gusto al escándalo de Emilia Pérez.
Información:: Kyle Buchanan / The New York Times Company
Diseño: Fernanda Téllez
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