“Se vivieron jornadas espectaculares y buen ambiente; es una especie de recompensa al trabajo que se está haciendo, al igual que armonía y sana competencia”, mencionó Jorge Mañé, presidente de la Federación Mexicana de Pádel (Femepa).
“Es el deporte que más crece a nivel porcentual, hay una ebullición padrísima, cada día hay más clubs en construcción, jugadores y mejor organización”.
Finalmente, para cerrar el torneo se realizó la tradicional premiación, en donde todos los finalistas y ganadores pasaron por su respectivo trofeo, el cual no dudaron en presumir y mostrar a sus amigos y familiares.