TRIBUTO EUGENIO LÓPEZ RODEA

1934-2022

LEGADO INCOMPARABLE

Don Eugenio López Rodea era considerado por sus seres queridos como la columna inquebrantable dentro de la familia, siempre brindándoles su sabiduría, consejos y cariño.
Tras su sensible fallecimiento, el pasado viernes 20 de mayo a los 87 años de edad, el empresario deja un legado inigualable, a decir de sus allegados.
Don Eugenio y su esposa, Isabel Alonso, junto a su heredero, Eugenio.
Nació el 28 de junio de 1934, siendo el segundo hijo de Vicente López Resines y Alicia Rodea, quienes procrearon a Jaime (q.e.p.d.), Bertha, Teresa, Vicente y Federico.
Se podría decir que su padre, don Vicente, fue el primer emprendedor de la dinastía, pues a principios del siglo pasado convirtió una tienda de abarrotes de nombre La Costeña en un
imperio de productos enlatados.
Don Vicente López y Alicia Rodea con sus hijos, Jaime, Eugenio, Bertha, Teresa, Vicente y Federico
Doña Isabel y Eugenio se casaron el 4 de diciembre de 1962.
En 1923, López Resines se dio cuenta que mientras las frutas y los productos frescos disminuían de valor, las conservas mantenían su precio, por lo que decidió comenzar a vender sus propios chiles en vinagre.
Para 1948, esta idea se había convertido en una fábrica de 4 hectáreas. Eugenio y sus hermanos crecieron con este ejemplo; sin embargo, él no tenía el mismo interés que su padre por las conservas y, en 1961 comenzó su propio negocio enlatando fruta gracias a su pasión por la innovación y la calidad.
Don Vicente López y Alicia Rodea con sus hijos, Jaime, Eugenio, Bertha, Teresa, Vicente y Federico
Azita Mujica, don Eugenio López y Guadalupe Ramos Cárdenas en una comida de Jumex en 2006.

FRASE 03

Nos deja, don Eugenio López, un legado inigualable de generosidad y ejemplo como padre, empresario y amigo. Descanse en paz un gran señor”

Lo que arrancó como una empresa de 20 empleados, en tres años se convirtió en una compañía de jugos y néctares conocida por su característica lata azul y su nuevo nombre: Jumex, la cual consolidó como la procesadora más importante en su tipo no sólo de México sino de Estados Unidos.
El 4 de diciembre de 1962 se casó con Isabel Alonso, el gran amor de su vida, y, para 1967, la pareja le dio la bienvenida a su único hijo, Eugenio, quien se convertiría en el coleccionista de arte contemporáneo más grande de Latinoamérica.
La sencillez y la calidad humana fueron características del matrimonio.
Miguel Alemán Magnani, Miguel Alemán Velasco, Eugenio López y su padre, Eugenio, durante un reconocimiento que recibió don Miguel Alemán en octubre de 2018.

Un hombre ejemplar en todo sentido, con una visión extraordinaria para los negocios. Extrañaremos a nuestro gran amigo Eugenio”.

El empresario fue una pieza angular para darle empuje en el mundo del coleccionismo. Fue clave en la creación de la Fundación Jumex Arte Contemporáneo, al acompañar a su heredero, en 2001, a la inauguración de la primera muestra de la Colección Jumex en el inmueble de mil 400 metros cuadrados en Ecatepec, edificio diseñado por el arquitecto Guillermo García.
Apoyando a su hijo en todos sus ideales, lo impulsó a llevar su sueño al siguiente nivel al inaugurar el 19 de noviembre de 2013 el Museo Jumex en la Colonia Ampliación Granada, el cual ha logrado poner a México en la escena del arte contemporáneo mundial.
Isabel y Eugenio fueron parte importante para impulsar a su único hijo en su pasión por el arte.

FRASE 03

Para todos en la familia Serrano, Eugenio e Isabelita, a quienes tratamos en muchas ocasiones, eran una pareja perfecta. Siempre estuvieron al lado de sus amigos y los de su hijo, Eugenio, a quien queremos tanto. Estoy segura que están ya juntos en el cielo”

En 2009, los hermanos Federico, Vicente y Eugenio López fueron reconocidos en la Gala Endeavor.
Fomentó el altruismo y el amor por su país y, por ello, fue galardonado con varios reconocimientos, entre ellos, el premio Endeavor, el cual recibió en 2009 junto a sus hermanos.
En septiembre de 2017, sufrió la pérdida de su esposa y compañera de vida, quien falleció a los 79 años.
Sus más allegados afirman que era un hombre excepcional, que dejó huella por su liderazgo y compromiso por México y su preocupación y generosidad con las personas que lo rodeaban son. Descanse en paz
Don Eugenio convivió con Paulina y Oscar Madrazo en la inauguración del Museo Jumex en 2013.

FRASE 03

Paz a don Eugenio López Rodea, un líder ejemplar con un gran sentido del humor. Comprensión a nuestro adorado Eugenio López Alonso, a quien siempre acompañaremos y llenaremos de amor infinito”

Don Eugenio, empresario exitoso, generoso y visionario. Su espíritu filantrópico fue un gran legado que le heredó a su hijo, nuestro querido amigo Eugenio. Siempre lo recordaremos junto a su esposa, Isabelita”.

Antonio y Momchita Cosío
Eugenio y Mauricio Berger en la inauguración de la muestra ‘Habitar el Tiempo’, curada por Michel Blancsubé, en el Museo Jumex en 2014.

FRASE 03

Siento mucho la partida de don Eugenio, una gran persona y gran amigo. Ejemplo de trabajo, de constancia y de lucha por construir un México próspero”.

Al despedirnos del papá de Eugenio nos queda el recuerdo de que fue un hombre con un compromiso a su familia y a México, emprendedor, leal y con un verdadero amor y admiración a Eugenio y su esposa, Chabelita (q.e.p.d.), que fueron el amor de su vida. Esas cualidades hicieron que siempre lo recordaremos como una persona única, muy especial y que es un orgullo para todos los que lo conocimos

Don Eugenio fue una persona admirable por su incansable labor para construir y consolidar Jumex con una visión única. Hombre de familia, gozador de la vida. Se recordará siempre por el legado que dejó y su gran cariño por Eugenio, su hijo”.

Qué gran ejemplo para México, un hombre que soñó en grande y superó su meta. Su sentido de familia y el gran amor y orgullo por Chabelita y su hijo, Eugenio, lo distinguieron siempre”

Era un señorón, conmigo siempre fue muy amable, muy cariñoso; era muy serio en lo que decía y de pocas palabras, pero cuando le caías bien, le caías bien y era adorable”

Conocí poco a Eugenio papá y lo encontré generoso y encantador. Eugenio chico está en el Patronato de Amigos del MAP y lo queremos mucho”.

MARIE THÉRÈSE ARANGO, presidenta de la AAMAP

Recuerdo muy bien un viaje que hicimos a Buenos Aires con don Eugenio y su esposa. Disfruté muchísimo sus pláticas, su inteligencia, pero, sobre todo, su sensatez. Fue una gran persona que deja un importante legado”.