Como un hombre de trabajo, visión y poseedor de un gran sentido del humor, pero, sobre todo, de gran calidad humana, así recuerdan sus seres queridos a Fernando Lemmen-Meyer Otero tras su sensible fallecimiento.
Nació el 31 de diciembre de 1926 en Mazatlán, Sinaloa, junto a su gemelo, Federico, quienes fueron los últimos hijos de los seis que integraron la familia de Teodoro Lemmen-Meyer Osuna y Dolores Otero Goicochea.