Alejandro Ezquerra
Para el médico y paramédico, el formar parte del equipo de trabajo de uno de los primeros centros Covid-19, el Instituto Nacional de Cardiología, le permitió hacerse a la idea de los cuidados y precauciones que se deben tener para protegerse de este virus.
Ahora, ya vacunado con las dos dosis de la fórmula de Pfizer y BioNTech, sabe que la vacuna lo protege de no desarrollar la enfermedad de manera grave, más no de transmitir el virus, por lo que se sigue cuidando de la misma forma.
“Llevo viendo esta enfermedad desde que llegó al Instituto de Cardiología, alrededor de abril o mayo, y no me he contagiado. Al principio, daba miedo y me persignaba, pero luego entiendes que lo más importante es el cubrebocas. Para mí, esa era la vacuna desde antes”. ALEJANDRO EZQUERRA, médico
Kitzia Jiménez-O’Farrill
En las instalaciones del Colegio Vista Hermosa, la amante de los caballos recibió la primera dosis de la vacuna de AstraZeneca, y, a pesar de experimentar efectos secundarios como cansancio, la abuela de Mar y Pedro Checa rescata la forma en que se brindó atención a todos los presentes, sin distinciones ni privilegios.
“En la fila había distintos tipos de personas: ricos, pobres, gordos, flacos, mayores o de apenas sesenta años. El trato que nos daban a todos era el mismo, perfecto, todo el mundo era encantador; no había preferencias con nadie por ningún motivo. Me volví a sentir orgullosa de México”. KITIZIA JIMÉNEZ- O’FARRILL
Hilda Calderón
En diciembre del año pasado, la empresaria del ámbito de la moda tuvo que pasar por un momento complicado cuando se contagió, lo cual derivó una neumonía que la mantuvo hospitalizada por varias semanas en Estados Unidos.
Luego de una espera posterior a su recuperación, tuvo la oportunidad de recibir la vacuna del laboratorio Moderna en la ciudad de Brownsville, Texas, un hecho que la hizo sentirse agradecida y aliviada, sobre todo,
por lo que acababa de superar.
“Cuando me vacunaron sentí mucho gusto y felicidad, di gracias a Dios. Me siento privilegiada, espero que todos estemos vacunados porque para mí fue una situación tremenda”. HILDA CALDERÓN
Roberto y Patricia Cedeño
En un primer momento, los papás del comunicólogo Mauricio Cedeño
fueron a un centro de vacunación, en el que les dijeron que ya no tenían más, por lo que decidieron ir a otro, donde afortunadamente recibieron
la sustancia.
Ambos, él de 73 y ella de 62 años de edad, tuvieron la mala fortuna de contagiarse, por lo que saben la relevancia que implica el estar inmunizados ante este virus.
“Cuando empezaron a decir que ya nos podían vacunar estuvimos muy dispuestos, lo cual fue muy importante porque sabemos lo que es pasar por eso; la atención que recibimos fue buena, ordenada y atenta”. PATRICIA CEDEÑO
Héctor Orellana
Al principio, por la desinformación que circulaba al respecto, el contador tenía sus reservas sobre si vacunarse o no, duda que se disipó cuando recurrió a la opinión de médicos y notó que muchas personas eran inmunizadas en México y el extranjero.
De esta manera, asistió el día que le tocaba en función de su apellido y estuvo alrededor de tres horas en la Escuela Primaria Manuel Acuña, en Cuajimalpa, de donde salió con la primera dosis de la vacuna
de AstraZeneca y con una grata sensación.
“Al salir, había un sentimiento positivo, de satisfacción, de que ya habían puesto la vacuna, era una sensación agradable; dentro de la circunstancia que estamos viviendo, me siento afortunado”. HÉCTOR ORELLANA
Alejandro Rodríguez
Siempre informado con las recomendaciones e información de los especialistas, el empresario continúa con las medidas de distanciamiento y uso de cubrebocas, en lo que espera ansioso la segunda dosis del medicamento.
En su caso, sólo experimentó dolor de brazo por un par de días, un precio nada comparable comparado con el bienestar que representa para él, su familia y la población en general.
“Ahora que me pusieron la primera dosis me dio mucha tranquilidad, pues pienso que esto nos ayudará a todos a inmunizarnos. Recomiendo a quienes todavía no lo hacen que lo hagan, con toda ilusión de que esto será un mejor mañana para todos y así retomar la vida que teníamos antes”. ALEJANDRO RODRÍGUEZ
Verónica Salame
De manera fortuita, la publirrelacionista recibió la vacuna de la farmacéutica Moderna, en San Diego, Estados Unidos, y, aunque en un principio esperaba que sólo atendieran a su mamá, Renee Umansky, también lo hicieron con ella.
Tras este golpe de suerte y la inmediata aplicación, experimentó reacciones secundarias similares a los síntomas que padeció cuando tuvo Covid-19, en mayo del año pasado, lo cual pasó a segundo término, pues fue más su júbilo por saber que se encuentra protegida.
“Me siento más tranquila, sobre todo, con esperanza y contenta de ver que ya hay la posibilidad de estar seguros; sí tengo mucha fe en la vacuna, no creo que nos van a poner en riesgo
a tanta gente”. VERÓNICA SALAME
Rosario Chapa
A la investigadora jubilada y mamá del empresario Edgar Bernal, la noticia de la vacunación le llegó cuando estaba en Acapulco, por lo que tuvo que trasladarse a la Ciudad de México para no dejar pasar la oportunidad.
Una vez que acudió a su respectiva sede, la cual estaba muy concurrida, tuvo que esperar cerca de cuatro horas, ya que la distribución de la dosis había tenido un retraso, pero, sostuvo que se trata de algo necesario para todos los adultos mayores.
“Vale la pena vacunarse porque uno se protegerá por lo menos de una patología grave para así evitar la hospitalización y la muerte, aunque hay efectos secundarios que pasan pronto”. ROSARIO CHAPA
Susana Henkel
Aunque al principio no estaba decidida de vacunarse, ya que es muy susceptible a los efectos secundarios, se convenció al investigar más a fondo sobre el tema.
Afortunadamente, vivió un proceso eficiente y rápido, sin secuelas, lo que la llenó de confianza en lo que espera la segunda dosis del laboratorio AstraZeneca.
“Es una cosa tan increíblemente rara y especial que nos ha tocado vivir. En décadas, incluso cientos de años, sí se han vivido muchas pandemias, pero como ésta, pocas. Hemos tenido la suerte de que toda la ciencia puso su empeño para inmunizarnos de un virus que no conocíamos”. SUSANA HENKEL
Luis Cueva
Afortunado y sin efectos secundarios es como se siente Luis Cueva, a quien le administraron el fármaco de AstraZeneca. Cuando se comenzó a hablar sobre las vacunas, tuvo algunas reservas, por lo que se puso a investigar y a leer para despejar sus dudas.
“Creo que es una decisión muy personal, pero a todos mis amigos y conocidos, particularmente, a mis contemporáneos, siempre que hablo con ellos les insisto que lo hagan en cuanto les sea posible, tanto por ellos como por sus familias, y que estén muy pendientes de las fechas y lugares”. LUIS CUEVA